Artículo Mensual
Por: Hugo Isaac Pérez Álvarez A01220865
@LelugoDruid
lelugodruid@gmail.com
A pesar de que solo hemos asistido por unas cuantas semanas a la clase de Ética Persona y Sociedad, el contenido de ella ha cambiado mi mente y concepción de las cosas de una manera radical, desde la manera en que veo a mis semejantes, hasta replantearme los compromisos como estudiante y, lo que es más importante, ciudadano de este mundo.
Las generaciones jóvenes del presente estamos a unos cuantos pasos de heredar este país y mundo el cual se nos entrega, por desgracia, en una situación alarmante en cuanto muchos aspectos como el social, político y lo que creo más importante ecológicamente. Por esta misma razón es que somos nosotros los jóvenes los que tenemos que hacer algo para cambiar esta situación, poner las manos a la obra y hacer un cambio basado en los ciudadanos y no esperando en los sistemas. Con preocupación y a veces confusión veo que por desgracia en lugar de estarnos preparando para recibir esta gran responsabilidad, los jóvenes de mi generación, estamos cayendo en un juego en el solo nos preocupan los placeres citadinos y nuestro pequeño circulo social de amigos o familia, a tanto puede llegar esto que muchas veces con tristeza me doy cuenta de lo mucho que faltan valores y la sensibilidad en nosotros los jóvenes que ni siquiera cuestionan las injusticias que abundan en nuestro país. En mi caso desde chico he tenido el interés por estas situaciones y tal vez por herencia de mis padres me considero un poco más consiente aunque muchas veces me invade la confusión pues al ver que la mayoría de las personas actúan con ese mismo conformismo y falta de interés me hacen pensar si tal vez el que este mal soy yo. Muchas veces pensé en actuar, hacer algo pero comentarios como el que alguna persona me dijo de que “la acción que yo pueda hacer es tan solo un grano de arena y de cosas tan pequeñas no logras nada ” junto con en veces la falta de tiempo (que en veces no existe es tan solo flojera o falta de organización) me hacen en veces desanimar. Por suerte el enfoque que se le dio a la clase de ética y una conversación que tuve con mi maestra cambió la manera en que veo las cosas. En primera en la clase de ética se nos alentó a que hagamos algo por nuestra sociedad, a participar a ayudar y a sensibilizarnos cosa que he empezado a hacer y de la cual en tan poco tiempo ya aprendí lecciones, la experiencia en la vigilia por la guardería ABC y una conversación con mi maestra durante el evento realmente me cambió, discutimos entre un compañero, Alicia y yo que si en verdad habíamos logrado un cambio con esa acción tan pequeña pero al responderme con una positiva y mostrarme que en realidad si se logra mucho con los granitos de arena, me hizo recapacitar y recuperar esperanza, me di cuenta que aunque sean pasos de hormiguita si nadie los da entonces nuestra sociedad no avanza.
Esta nueva esperanza sacan a relucir nuevos retos para nuestra juventud y creo que uno de ellos y el más importante es que entre nosotros jóvenes, que nos escuchamos y entendemos, comuniquemos y entre nosotros nos convenzamos de ese mensaje de cambio, cambio de actitud de flojera y conformismo y de hacer de este un país y mundo mejor . Un muy buen ejemplo de esta actitud es MARCO el fundador de mexico2040.com un foro dedicado a la discusión y acción ciudadana con una idea genial, el pasar la voz a otras personas en nuestro país para que se enteren de lo que sucede en nuestra sociedad y poder hacer algo por ello. Aunque en mi opinión creo que los medios electrónicos son la manera más efectiva de hacer esto, creo que hay maneras aun más rápidas que los foros como lo son las redes sociales las cuales hacen que un solo comentario o idea se expanda viralmente por toda la red, tal vez se pueda canalizar la idea de Marco mas enfocado a estos medios y se logre algo aún mucho mayor.
Lo aprendido en experiencia y teoría en la clase de ética me ha cambiado la manera de pensar, en especial me ha hecho cuestionarme cosas que muchas veces dejas pasar desapercibidas como una injusticia, más sensible a lo que sucede en mi sociedad y mucho más tolerante pues al estudiar la ética te entrañas en la complejidad del cerebro humano y puedes entender (aunque muchas veces no completamente) el tan variado comportamiento humano. Sin embargo creo que lo más valioso que hasta ahora he sacado de ética persona y sociedad es el ánimo por hacer esos pasitos de hormiga que algún día nos llevaran a algo.
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