El año pasado, un joven llamado Sergio Adrián Hernández Güereca fue asesinado por un agente de la Patrulla Fronteriza (PF) estadounidense, lo cual provocó un enfrentamiento entre los gobiernos de Estados Unidos y México.
A pesar de que la PF es capaz de utilizar fuerza letal contra los inmigrantes mexicanos hostiles, hay muchas lagunas respecto a la investigación del caso. La PF reclama que Güereca agredió a la Patrulla, lanzándoles piedras a los oficiales, por lo que éstos estaban en su derecho de defenderse utilizando sus armas de fuego. Sin embargo, evidencia encontrada en la línea fronteriza (tales como los casquillos de las balas) posiciona a los agentes de la PF dentro del territorio mexicano, cosa que anularía el derecho de los patrulleros de defenderse con fuerza letal, además de ubicar al cadáver del joven asesinado en territorio mexicano, a seis metros de la línea fronteriza.
La oficina Federal de Investigación (FBI, por sus siglas en inglés), intentó culpar al ejército mexicano, explicando que soldados del este país los incitaron a la violencia y que la muerte de Hernández Güereca fue provocada por balas perdidas, versión que el Ejército negó. La versión oficial de Andrea Simmons, vocera del FBI, fue que después de la muerte de Güereca, llegaron los soldados mexicanos y apuntaron con sus armas a la PF, aunque no abrieron fuego.
Tenemos dos versiones: la de la PF y el FBI, y la de los parientes y testigos del crimen. ¿A quién se le debe de creer? ¿Al gobierno estadounidense que, de aceptar la culpa del incidente, afectaría sus relaciones con el gobierno mexicano?, ¿o a los padres del muerto, quienes ni siquiera exigen dinero, sino que se haga justicia?
Esta noticia provocó una conmoción en la comunidad chihuahuense y a la Secretaría de Relaciones Exteriores, quienes le pidieron diplomáticamente al gobierno de los Estados Unidos que se realizara una investigación exhaustiva.
¿De verdad está en los intereses del gobierno de Estados Unidos realizar una investigación “exhaustiva”? De ser real la versión de los familiares de Hernández Güereca, entonces la PF se encontraría en una situación muy controvertida. ¿En qué momento es más importante preservar la justicia y revelar a los culpables de la muerte del adolescente mexicano que prevenir un posible conflicto entre dos naciones vecinas?
Analizando los intereses, de parte del gobierno estadounidense sólo está en riesgo la convivencia afable que ha tenido con el gobierno mexicano. De parte del gobierno mexicano, se busca calmar las exigencias de la comunidad chihuahuense y darle paz a la familia del muerto. La vida de una persona es la que estaba en juego, y los culpables no se identifican. El simple hecho de mentir y ocultar la evidencia respecto al incidente menosprecia el valor de la vida de Güereca.
¿Cuál es la cosa más justa? Que con transparencia, se debe de desvelar la identidad de los homicidas y penalizarlos con el castigo adecuado, sin ningún movimiento político para beneficiar los intereses de unos pocos y perjudicar o dañar la credibilidad de otros.
Josué Emmanuel Lépez Sánchez
A00343604
Bibliografía
Silva, M. H. (2010, Julio 10). Muerte de joven enfrenta a México y EU. El Universal, p. http://www.eluniversal.mx/nacion/178291.html.
A pesar de que la PF es capaz de utilizar fuerza letal contra los inmigrantes mexicanos hostiles, hay muchas lagunas respecto a la investigación del caso. La PF reclama que Güereca agredió a la Patrulla, lanzándoles piedras a los oficiales, por lo que éstos estaban en su derecho de defenderse utilizando sus armas de fuego. Sin embargo, evidencia encontrada en la línea fronteriza (tales como los casquillos de las balas) posiciona a los agentes de la PF dentro del territorio mexicano, cosa que anularía el derecho de los patrulleros de defenderse con fuerza letal, además de ubicar al cadáver del joven asesinado en territorio mexicano, a seis metros de la línea fronteriza.
La oficina Federal de Investigación (FBI, por sus siglas en inglés), intentó culpar al ejército mexicano, explicando que soldados del este país los incitaron a la violencia y que la muerte de Hernández Güereca fue provocada por balas perdidas, versión que el Ejército negó. La versión oficial de Andrea Simmons, vocera del FBI, fue que después de la muerte de Güereca, llegaron los soldados mexicanos y apuntaron con sus armas a la PF, aunque no abrieron fuego.
Tenemos dos versiones: la de la PF y el FBI, y la de los parientes y testigos del crimen. ¿A quién se le debe de creer? ¿Al gobierno estadounidense que, de aceptar la culpa del incidente, afectaría sus relaciones con el gobierno mexicano?, ¿o a los padres del muerto, quienes ni siquiera exigen dinero, sino que se haga justicia?
Esta noticia provocó una conmoción en la comunidad chihuahuense y a la Secretaría de Relaciones Exteriores, quienes le pidieron diplomáticamente al gobierno de los Estados Unidos que se realizara una investigación exhaustiva.
¿De verdad está en los intereses del gobierno de Estados Unidos realizar una investigación “exhaustiva”? De ser real la versión de los familiares de Hernández Güereca, entonces la PF se encontraría en una situación muy controvertida. ¿En qué momento es más importante preservar la justicia y revelar a los culpables de la muerte del adolescente mexicano que prevenir un posible conflicto entre dos naciones vecinas?
Analizando los intereses, de parte del gobierno estadounidense sólo está en riesgo la convivencia afable que ha tenido con el gobierno mexicano. De parte del gobierno mexicano, se busca calmar las exigencias de la comunidad chihuahuense y darle paz a la familia del muerto. La vida de una persona es la que estaba en juego, y los culpables no se identifican. El simple hecho de mentir y ocultar la evidencia respecto al incidente menosprecia el valor de la vida de Güereca.
¿Cuál es la cosa más justa? Que con transparencia, se debe de desvelar la identidad de los homicidas y penalizarlos con el castigo adecuado, sin ningún movimiento político para beneficiar los intereses de unos pocos y perjudicar o dañar la credibilidad de otros.
Josué Emmanuel Lépez Sánchez
A00343604
Bibliografía
Silva, M. H. (2010, Julio 10). Muerte de joven enfrenta a México y EU. El Universal, p. http://www.eluniversal.mx/nacion/178291.html.
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