martes, 9 de mayo de 2017


Inequidad de género, la realidad.

Introducción:

En general, los derechos y la condición de la mujer mejoraron considerablemente desde el siglo pasado; sin embargo, la igualdad de género ha sido recientemente amenazada en el último decenio. Las leyes y las prácticas claramente sexistas están siendo eliminadas lentamente mientras que las percepciones sociales de los "roles de las mujeres" siguen estancándose e incluso se degradan de nuevo a los ideales tradicionales. Son estas percepciones sociales las que desafían la evolución de las mujeres como iguales en todos los niveles. Las mujeres que siguen cuidadosamente sus papeles esperados nunca pueden reconocer el sexismo como una fuerza opresiva en su vida.
En este ensayo, voy a argumentar que el sexismo sutil y descarado sigue existiendo a lo largo de los campos educativos, económicos, y deportivos.

Key words: Desigualdad, género, actualidad, educación, economía.

Desarrollo:

Primeramente dentro del área educativa las mujeres fueron discriminadas y consideradas inmerecidas de la misma. Es sorprendente saber que, aunque Harvard abrió sus puertas en 1636, la primera universidad que admitió a las mujeres no lo hizo durante otros 200 años . Las mujeres no comenzaron a asistir a la universidad en igual número a los hombres sino hasta una época más recientemente como 1980 (García de león, 1980, pág. 95 y 96). 11 años después que Yale y Princeton en 1969 (Clemow, 2012).

La educación es algo que las mujeres a menudo dan por sentado y no piensan en todo el trabajo duro que se llevó a cabo para alcanzar el derecho a la educación. En el pasado, las mujeres con poca educación a menudo creían que no podían participar en la política, tener una carrera o incluso poseer propiedades. Las mujeres que tuvieron la suerte de haber recibido una educación de calidad eran más propensas a ser pioneras en el activismo cívico y hacer historia, como Simone de Beauvoir. Esta mujer, era una pensadora y novelista francesa que fue pieza clave para los derechos de la mujer. Formó, junto con otras feministas, la Liga de los Derechos de la Mujer para defender a las mujeres ante cualquier discriminación sexista. 

Al comprender la historia de la educación de las mujeres se puede apreciar hasta dónde hemos llegado y las mujeres extraordinarias que nos han traído aquí. Sin embargo, hoy por hoy existe un ciclo repetitivo dentro del sistema educativo el cual cría a los jóvenes con patrones de desigualdad y se reproduce dentro de las mismas escuelas a través de procesos formales e informales.


Uno de los principales patrones es a través de la toma de cursos. Esto es importante porque la toma de cursos representa una gran disparidad entre los sexos en cuanto a los cursos que toman los varones y las mujeres, lo que conduce a diferentes vías educativas y ocupacionales entre hombres y mujeres.

Por ejemplo, las mujeres tienden a tomar menos cursos matemáticos y científicos avanzados, lo que las lleva a estar menos preparadas para seguir estas carreras en la tecnología y la informática, por esto se plantea “que no es suficiente con la oportunidad de acudir a la escuela, hay que romper el paradigma de los roles femeninos y elegir disciplinas relacionadas con la ciencia y la tecnología” (Velasco, 2013, p. 1).

Debido a que sus derechos se ven discriminados al pensarse que no tienen la capacidad de realizar las tareas que el género opuesto sí puede, los paradigmas a los que se refiere Velasco deberían ser desterrados de las sociedades ya que atentan contra la felicidad de las mujeres las cuales se sienten inferiores. Y según Aristóteles, la felicidad es el último fin y para poder conseguirla debemos actuar de una manera prudente en base a los principios morales (Cortina, 1996), los cuales nos obligan a respetar y considerar a las mujeres a la par del hombre.

Las normas culturales también pueden ser un factor que causa discriminación sexual en la educación. Por ejemplo, la sociedad sugiere que las mujeres deben ser madres y ser responsables de la mayor parte de la crianza de los hijos. Por lo tanto, las mujeres se sienten obligadas a seguir caminos educativos que conducen a ocupaciones que permiten largas ausencias para que puedan quedarse en casa siendo madres. Lo anterior priva a las mujeres de la independencia de sus tiempos, una injusticia que atenta contra su libertad y su dignidad, la cual según Kant, nos hace merecedores de todo el respeto moral y evita que seamos usados como medios en este caso para la crianza de los niños (Cortina, 1996 pág.7).

La igualdad formal entre hombres y mujeres se ha establecido ya en países como México, sin embargo como lo dice un estudio de ONU mujeres (2009) :

Para alcanzar la igualdad sustantiva, no solo es necesario hacer más, sino hacerlo mejor. Aunque la paridad numérica en el acceso a la educación, el empleo o la protección social es un objetivo importante, no implica directamente el disfrute de los derechos ni la igualdad sustantiva. En lugar de limitarse a absorber a un mayor número de niñas en sistemas educativos insuficientemente financiados, las escuelas deben proporcionar una educación de calidad y un entorno seguro de aprendizaje para las niñas y los niños. (p. 593)
                                              
En los últimos años, la cuestión de la desigualdad de género en la economía ha alcanzado un lugar destacado en los debates públicos y políticos. La atención se ha centrado en la participación de las mujeres en la fuerza de trabajo y dentro de los altos cargos de las organizaciones. Si bien se han hecho algunos progresos, la mujer sigue estando mal pagada, subestimada, infrautilizada, y sobre explotada.

Para comenzar a plantear el gran problema, según una nota publicada por el INEGI, en nuestro país las mujeres ven una abismal diferencia en su contra dentro del mundo laboral. Primeramente se ven reducidas en número, de los casi 52 millones de trabajadores mexicanos activos, las mujeres únicamente representan menos de 20 millones. Según esta misma nota, las mujeres en el 2015 ganaban igual que los hombres de una década atrás. Los principales trabajos en presentar este tipo de disparejos son directivos y funcionarios.

“Las empresas mexicanas tienen al frente de la dirección tan sólo 2% de mujeres, en contraste con 6% de hombres” (Velasco, 2013, p. 2).
Donde por cada 99.76 pesos que gana un hombre, una mujer se lleva tan solo 77.5 pesos. Algo muy importante que Velasco (2013) también menciona es que “en México, las mujeres que trabajan en el empleo informal representan 29%, y en el sector doméstico 11%. Lo anterior origina falta de seguridad social, sueldos bajos y jornadas laborales largas” (p.2).
Según Platón un individuo justo es aquel que usa su razón según la verdad , en este caso el conocer que una mujer recibe menos servicios y  dinero por hacer el mismo trabajo que un hombre hace que la sociedad mexicana sea vista como injusta lo que la compromete y dificulta que se logre un estado de bien el cual según Platón es la causa de todo lo bello y lo perfecto. (de Azcarate, 1871).



Se ha planteado “Que el cambio tecnológico y la liberalización comercial son conjuntamente los factores centrales que explican el comportamiento de la desigualdad salarial en México, y el cambio tecnológico es un factor que amplía la desigualdad, mientras que el comercio internacional es un componente que la reduce” (Nieto, 2011, p. 153). Tras la liberación comercial, la diferencia salarial estuvo en su mayor punto, sin embargo se fue estabilizando con los años.

Hoy en día el cambio tecnológico implica para las compañías contratar personal bien preparado, si retomamos el primer argumento de este ensayo podemos apreciar como se discriminan a las mujeres desde que se les está educando para que se sientan menos preparadas en los ámbitos matemáticos y científicos  y no puedan protestar ante esto.

Pienso que para poder avanzar como sociedad los mexicanos debemos respetar y valorar los esfuerzos de cualquier mujer igual a los de un hombre ya que “no nada más se pretende que las mujeres sean valoradas y tratadas equitativamente en el ámbito público, sino también se revalora el trabajo y las aportaciones que pueden hacer los hombres en el ámbito familiar y doméstico, propiciando relaciones equitativas entre ambos sexos en las dos esferas” (Beltran, 2012, p. 203). De igual manera Beltrán afirma que para alcanzar este estado igualitario es necesario cambiar y dejar de creer que con ecualizar a los hombres y mujeres ante la ley bastará para resolver el problema. Lo que debemos buscar es la igualdad, es decir dar a cada quien lo que merece en función de sus condiciones para poder seguir creciendo y acercarnos a un mundo mejor.




Conclusión:
Para finalizar de la mejor manera este tema, se debe hacer hincapié en el punto concordante entre los pasados argumentos, la educación, como alguna vez Nelson Mandela dijo; “es el arma más poderosa que puedes usar para cambiar el mundo”. Por esto mismo los sistemas educativos de la gran mayoría de las naciones deberán cambiar ya que están transmitiendo ciclos repetitivos de estereotipos a niños y jóvenes.

“A pesar de que las mujeres representan más de 50% de la población mundial, continúan viviendo bajo un ambiente de inequidad como resultado de prácticas sociales discriminatorias” (Velasco, 2013, p. 2). Para solucionar la educación debe contar con “libros de texto sensibles a los comportamientos de género, programas de capacitación para la identicación de las prácticas sexistas en la vida diaria de las escuelas, la mayor concientización sobre la discriminación, el desarrollo de institucionalidad y políticas públicas para las mujeres” (del Carmen, 2013, p. I4).

También es importante recordar que los niños no se crían solamente en la escuela, como dice el artículo de María del Carmen, que tambien hay que cuidar a nuestros niños de lo que aprenden fuera de la escuela porque existen cientos de materiales contaminantes que muchas veces los padres pasan por alto, “véase por ejemplo, el rap y sus letras, el “perreo” como baile, la cumbia villera en el Cono Sur y las tantas veces mencionadas telenovelas cuyos contenidos refuerzan posiciones subordinadas de las mujeres” (del Carmen, 2013, p. I4).

Es de vital importancia remarcar que para lograr la equidad de género se requiere participación y esfuerzo de todas las sociedades para que por fin la mujer pueda hacer valer ese derecho innato que le es quebrantado tan injustamente; así como educar a las futuras generaciones con este nuevo modelo en el que también los hombres se pueden quedar en casa a ayudar con los hijos y la mujer sale a trabajar, simplemente porque tenemos la misma capacidad de hacerlo.

Al mismo tiempo que inculcamos esto, es necesario recalcar las características fisiológicas que nos diferencian para así tener en cuenta qué situaciones podrían resultar más difíciles o incluso imposibles para cada género; con esto lograríamos que estas generaciones vayan transformando la sociedad con su trato igualitario hacia las personas y con la esperanza de que se exploten todas nuestras capacidades sin miedo a ser juzgados o ser discriminados.










                                              











                                  

Bibliografía:


1.-   ONU Mujeres, , EL PROGRESO DE LAS MUJERES EN EL MUNDO 2015-2016. TRANSFORMAR LAS ECONOMÍAS PARA REALIZAR LOS DERECHOS. RESUMEN Revista Estudos Feministas [en línea] 2016, 24 (Mayo-Agosto) : [Fecha de consulta: 21 de marzo de 2017] Disponible en: ISSN 0104-026X

2.- Pedrero Nieto, Mercedes, Valdivia López, Marcos, Segmentación laboral, educación y desigualdad salarial en México Revista Mexicana de Sociología [en línea] 2011, 73 (Enero-Marzo) : [Fecha de consulta: 21 de marzo de 2017] Disponible en: ISSN 0188-2503

3.-Beltrán y Puga, Alma Luz, MIRADAS SOBRE LA IGUALDAD DE GÉNERO  Isonomía. Revista de Teoría y Filosofía del Derecho [en línea] 2008, (Abril-Sin mes) : [Fecha de consulta: 22 de marzo de 2017] Disponible en: ISSN 1405-0218

4.- del Carmen Feijoó, Maria. (2013). Educación y equidad de género (44th ed., pp. I2-I4). Buenos aires: LASAFORUM. Retrieved from https://lasa.international.pitt.edu/forum/files/vol44-issue2/Debates5.pdf

5.- Velasco Jiménez, María Teresa, La equidad de género: ¿utopía o realidad?Revista de Especialidades    Médico-Quirúrgicas [en linea] 2013, 18 (Enero-Marzo) : [Fecha de consulta: 22 de marzo de 2017] Disponible en: ISSN 1665-7330

6.- Cortina A. Ética. La vida mora y la reflexión ética. (1996) Santillana Madrid.
7.- de Azcarate, P. (1871). 5th ed. [ebook] Madrid: Dialogos. Available at: http://www.filosofia.org/cla/pla/img/azf05009.pdf [Accessed 22 Apr. 2017].

Complementaria:

              Fernandez, A. and Fernandez, A. (2017). Mujeres ganan 28% menos que hombres. [online] El Financiero. Available at: http://http://www.elfinancierocr.com/economia-y-politica/Calculadora_Salarial-Enigh-posgrados_0_716928334.html [Accessed 21 Mar. 2017].
              Simone de Beauvoir (2004-2017) Disponible en :http://www.biografiasyvidas.com/biografia/b/beauvoir.htm
              Gómez Lovera, M. (2015). Por cada peso que gana un hombre en México, una mujer gana.... [online] LaUnion.com.mx. Available at: https://www.launion.com.mx/morelos/nacional/noticias/81208-por-cada-peso-que-gana-un-hombre-en-mexico-una-mujer-gana.html [Accessed 21 Mar. 2017].
              INEGI. (2015). INEGI “ESTADÍSTICAS A PROPÓSITO DEL... DÍA INTERNACIONAL DEL TRABAJO (1 DE MAYO)”. [online] Available at: http://www.inegi.org.mx/saladeprensa/aproposito/2015/trabajo0.pdf [Accessed 21 Mar. 2017].
              Garcia de Leon, M. and Garcia de Cortázar, M. (1990). Universidades y Universitarios. 1st ed. [ebook] Madrid: Estudios, pp.95-96. Available at: http://www.mecd.gob.es/dctm/revista-de-educacion/articulosre1992/re199206.pdf?documentId=0901e72b8132cbfa [Accessed 22 Apr. 2017].



No hay comentarios:

Publicar un comentario