miércoles, 2 de mayo de 2012

Clonación Terapéutica, ¿buena o mala?


     
 Oscar Daniel Atanacio Pérez 343393     
         La clonación es un tema polémico, ya que no hace mucho se decía que,  ¿cómo es que  podríamos jugar a crear vidas de humanos ya existentes?, pero viendo esta interrogante de otro modo y con el avance de la tecnología, podemos dar otro enfoque a la clonación, ¿Por qué no  usar las células de algún paciente enfermo de los riñones para crear un riñón que le ayude a resolver su estado de enfermedad? Este es el tema a tratar sobre el por qué es bueno y por qué no se debe de acuerdo a distintas posturas y puntos de vista.  De acuerdo con la Real Academia Española,  la clonación es la producción  de un conjunto de células u organismos genéticamente idénticos,  por medio de reproducción asexual, es decir,  por medio de métodos que no incluyen la combinación de los gametos  para la creación de vida. Existen diferentes grados de clonación desde los más pequeños que pueden sustancias  o genes específicos, hasta cadenas de ADN modificadas para cierto funcionamiento. El primer experimento que hubo de clonación fue  en los años 70  con la clonación de células primarias en ovocitos de sapos de espuelas. 
Todo el proceso de clonación  se da por medio de trasplante de núcleos, esto consiste en introducir cierto núcleo  de una célula en especifico dentro de un ovulo fertilizado que permita el desarrollo de la célula nueva. En el caso de la ingeniería en biotecnología y biomédica se observa esta tendencia a intentar clonar seres vivos, pero, con una diferencia que en estas áreas lo que se busca no es  el clonar al ser humano completo y jugar a ser Dios, es decir, crear materia viva a partir de nuestra mano y usarla a nuestra voluntad, todo esto se ha tomado desde hacen mucho tiempo de una forma errónea empezando con la clonación de “Dolly” la oveja y un miedo irracional  a las nuevas tecnologías; sino más bien se busca dar una alternativa para esas personas que estén en lista de espera de trasplante, u otras situaciones en donde sea muy difícil asegurar la recuperación.
Actualmente no existe un material 100% compatible con el cuerpo humano, y la mayoría de la tecnología  con la que se cuenta en estos días es muy cara. Todo esto ha llevado al estudio de la clonación terapéutica, como una nueva solución a problemas como cuadriplejia, parálisis, problemas hepáticos, nefrológicos o pancreáticos. Sí se observa esta situación bajo diferentes tipos de puntos de vista como el utilitarista, podríamos concluir que la utilización de este método nos llevaría a elevar la felicidad de las personas enfermas en un alto nivel, a un costo de tiempo de estudio y perfeccionamiento de  técnicas, sin mencionar el económico.  Pero, ¿Qué nos hace pensar que lo que hacemos es éticamente correcto? ¿Cómo es que las diferencias posturas avalan o rechazan esta práctica? Sin duda alguna este tema tanto como otros como el aborto, son demasiado polémicos y con opiniones muy encontradas, tal como se pudo observar en el  año en el que se votó en la Organización de Naciones Unidas acerca de la legalización de la clonación humana, en dicha votación se obtuvieron los votos de 80 países  en contra de la clonación reproductiva, mientras que 79 países más incluyendo la “Santa sede”  votaron no en contra de  cualquier tipo de clonación (López, 2004, 2).
Todo estos dilemas éticos en lo referente a la clonación y los efectos que esta puede tener en la sociedad, son estudiados la bioética la cual es “la ciencia que nos permite relacionar  y comprender de una mejor manera la integración del conocimiento de la vida biológica y las dimensiones sociales; con el desarrollo de nuevas tecnologías se dan nuevos dilemas éticos,  y la bioética debe asumir los cambios y facilitar la orientación ética y tecnológica.”(Escobar, sin pagina,2003).Tal y como nos dicen Pineda y González en su texto “Reflexiones sobre bioética en ingeniería biomédica”, “El trabajo de la clonación terapéutica debe ser analizado mediante un punto de vista de la bioética que es y debe ser la base para cualquier trabajo realizado en o para el cuerpo humano para hacer trabajos de calidad, comprometidos,  y que siempre se debe preservar la vida del paciente” (Pineda, González; 2010,3).  Es deber del médico o persona que trata a un paciente el de mantenerlo con vida y ayudarlo a recuperar su salud;  muchas veces no se logra cumplir con esa obligación y todas las acciones que son llevadas por el equipo del médico tienen que fundamentadas en bases éticas, sin preferencias  y con  respeto hacia la vida humana. Esto nos lleva al siguiente punto en este ensayo.
Siempre se ha dicho al respecto de la clonación en general que el ser humano no debe jugar a ser Dios, pero ¿Cómo es que saben que la voluntad de Dios no es que usemos las técnicas de producción de vida, para salvarnos unos a otros?  Así como la iglesia nos fomenta el que siempre debemos de estar al pendiente de nuestro prójimo y que existen reglas de comportamiento dichas por un ser supremo, y cualquier cosa que fuera de esto es pecado o no debe ser hecho, podemos poner una contraparte a esa postura, ya que recordando  una frase muy famosa en el ámbito católico la cual dice: “Ayúdate que yo te ayudaré”, cómo es que esperamos la ayuda de Dios si ni siquiera hacemos el intento de curarnos o de preocuparnos por los demás. Tomemos el caso de un paciente con una nefropatía en lista de espera; actualmente son muy pocas las cirugías para trasplante de órganos en nuestro país y la lista de espera es enorme, si bien la cultura de la donación de órganos no es para nada sustentable en nuestro país y en algunas partes del mundo, es  una de las formas en que no es visto malo por Dios o más bien por la iglesia, dado que  tu cedes una parte de ti para salvar la vida de alguien más, ¿por qué ha de estar mal el ayudar al prójimo sin tener que arriesgar a que el trasplante no resulte favorable o en ciertos casos termine de matar al paciente? Más bien debemos de analizar todos los puntos de vista, desde cual es nuestro deber como seres humanos hijos de Dios, hasta razones utilitaristas y de contrato social que nos ayuden a superarnos como sociedad, la felicidad de las personas que no reciben un órgano por medio de donación está más que pisoteada, sin mencionar que muchas de las veces son personas que no tienen la capacidad monetaria para acceder a estos procedimientos. 
Como lo vimos en el libro de Rachels “no debemos usar a las personas como medios” (Rachels, 209,20) viendo este punto de vista desde un modo un poco extremos no se debería de fomentar la donación de órganos dado que usaríamos a las personas como medios para curar a alguien más; bien, ahora si nos ponemos en otro enfoque de la misma frase muchas veces no se usa a las personas como medios dado que nadie está destinado  ni obligado a donar sus órganos y lamentablemente en nuestro país la cultura de la donación de órganos es algo que no se fomenta ; este duelo entre si es correcto o incorrecto el donar los órganos lo pudimos ver en ese mismo caso de la bebé con anencefalia, es importante recalcar que desde la parte médica, una persona que nace ya sea sin cerebro o que queda con un mal funcionamiento o un nulo funcionamiento del encéfalo como en el caso de la muerte cerebral,  son personas que no pueden vivir y desarrollar su humanidad como las demás personas; son personas o más bien son seres humanos no vivos, los órganos pueden ser apoyados para seguir en funcionamiento pero la humanidad de la persona que tiene esta condición es nula,  por lo que se debe de ver por lo mejor para la persona y aunque se maneje la creencia de “toda vida humana es santa y solamente Dios puede quitarla” (Rachels, 2009,20), debemos analizar la situación y pensar en que aunque solamente Dios pueda seleccionar cuando quitar la vida, ponernos en los zapatos del otro, de nuestro amigo, familiar, conocido que está tendido en una cama, y elegir lo que el/la hubiera elegido.
 Se preguntarán cómo es que esto tiene que ver con la clonación terapéutica, bueno, la clonación tiene como objetivo la prevención de enfermedades y ayudar a mejorar a la población y de acuerdo a lo que vemos día con día, la cultura del mexicano y la corrupción que se maneja en nuestro país la lista de espera para acceder a un órgano donado es enorme y la oportunidad es casi nula. Desde esta perspectiva, el facilitar al paciente la posibilidad de seguir con vida mediante  la creación de órgano nuevo a partir de sus mismas células, es una muy viable opción para ayudar a las personas en espera de cierto órgano con una lista de espera más que enorme. Todo esto siempre regulándose y velando por la autonomía y libertad de los pacientes, para evitar las condiciones, acciones y sucesos que dieron origen a la bioética, y que afectaron la dignidad de los pacientes involucrado (Requena, 2008,2). Cada quien es libre de elegir  si entra a los procedimientos o sigue en espera, nadie puede forzarnos a escoger ni pasar por encima de nosotros para el desarrollo de la tecnología.  
Bien se podría decir que la clonación terapéutica podría tener un futuro muy bueno, pero, también podríamos comentar que también sus lados oscuros tal y como nos menciona Bernal: “Para la obtención de un embrión o célula funcional se desperdician centenares de células  y  se violan los principios de igualdad  y dignidad para los seres humanos, ya que los seres humanos somos dignos por el simple hecho de haber nacido.” (Bernal,2006,45). Analizando la posición de Bernal podemos  observar que nada es completamente positivo, todo tiene que tener un lado oscuro y dependiendo del enfoque en que se vean las cosas es la conclusión a la podemos llegar, ya que vista  esa misma frase en una postura utilitarista la cantidad de células desperdiciadas es como una consecuencia del apoyo que tendrá en el futuro la creación del órgano para curar a la persona,  pero también a cómo lo menciona se están violado principios universales como la dignidad, igualdad y derecho a la vida lo cual no es correcto en ningún.
Visto de un punto kantiano es nuestro deber velar por los demás y seguir imperativos impuestos para evitar la violación de la dignidad del ser humano al momento de hacer experimentos,  para terminar con este punto una de las mayores consecuencias a las que se puede caer con la investigación y el uso de la ingeniería para clonar  ya sea humanos o partes de humanos puede tener consideraciones mayores  como la deshumanización del ser humano  a como lo conocemos ahora al tratar nuevas formas de preservar la vida por medio la ingeniería genética o el querer crear nuevas vidas (Ponce,2006,8) Siempre se debe velar por el bien de los demás pero también no sobrepasando los limites establecidos por la sociedad y cumplir  con los mismos.
En conclusión, la clonación es, y será siempre un tema del cual se pueden debatir diferentes y diversos puntos de vista, pero algo que no se puede refutar es que es una realidad, los avances tecnológicos que se van desarrollando día con día nos permiten establecer nuevos procedimientos para poder curar, y tratar enfermedades  de una mejor manera, también  que es una idea viable aunque todavía está en pañales, el tiempo que se tiene que dedicar para cualquier tipo de investigación es muy, muy extenso, no c puede sacar al mercado algo sin haber sido probado y en el caso del cuerpo humano, mucho menos se puede,  pero la clonación de órganos para el tratamiento de enfermedades o estético ya está entre nosotros; para terminar quisiera remontarme  einvitarlos a ver  el reportaje “Cómo hacer un corazón”  hecho por la empresa National Geographic donde nos demuestran diferentes tipo de uso de clonación como en el caso de la creación de un corazón nuevo, o de orejas; la clonación no debe ser un objeto de miedo, siempre y cuando sea terapéutica, muchas veces la respuesta no está solamente en el clonar sino más bien en el  modificar el ADN para reactivar procesos primitivos de nuestro desarrollo, esto tal vez aleje un poco la clonación terapéutica de la clonación reproductiva y pueda ser visto de una manera más ética a lo que es visto la clonación reproductiva, en donde se deja intacta la dignidad de las personas, se busca una felicidad por tener otra oportunidad de vida y se busca que TODOS tengan acceso a esos procedimientos y no solamente cierto tipo de población.

Fuentes citadas:
·          Bernal Crespo, Sandra Julia. (2006). Clonación: un fundamento evolucionista de los principios de dignidad e igualdad frente a la técnica de la clonación de seres humanos con fines reproductivos. Revista de Derecho, diciembre, 17-60.
·          Escobar, Jaime. (2003) Bioética, Ciencia, Tecnología y Sociedad, Colombia, Extraido el 02 de Mayo de 2012
·          Firmenich, B. M. (n.d.). Clonación consideraciones éticas. Redalyc. Retrieved February 8, 2012, from http://redalyc.uaemex.mx/redalyc/src/inicio/ArtPdfRed.jsp?iCve=86330105.
·          López, N. (n.d.). Clonación Terapéutica. Redalyc. Retrieved February 8, 2012, from redalyc.uaemex.mx/redalyc/src/inicio/ArtPdfRed.jsp?iCve=83202302
·          Pineda, M. M., & González, K. (n.d.). Reflexiones sobre bioética e ingenieria biomédica: intrínseca complementariedad. Redalyc. Retrieved February 8, 2012, from redalyc.uaemex.mx/redalyc/src/inicio/ArtPdfRed.jsp?iCve=127020444001
·          Ponce del Castillo, Aída María. (2006). La deshumanización del hombre. Reflexiones de leon R. Kass sobre la clonación humana. Cuadernos de Bioética, XVII, mayo-agosto, 193-205.
·          Rachels, J. (2009). Introducción a la filosofía moral. México: FCE
·          Requena, P. (n.d.). dignidad y autonomía en la bioética norteamericana. Redalyc. Retrieved February 8, 2012, from redalyc.uaemex.mx/redalyc/src/inicio/ArtPdfRed.jsp?iCve=87506605.
·          Rovaletti, M. L. (n.d.). Más alla de la enfermedad:l as prerrogativas de la biomedicina actual. Redalyc. Retrieved February 8, 2012, from redalyc.uaemex.mx/redalyc/src/inicio/ArtPdfRed.jsp?iCve=55460209

No hay comentarios:

Publicar un comentario