La justicia y los indignados

INSTITUTO TECNOLÓGICO Y DE ESTUDIOS SUPERIORES DE MONTERREY
Bárbara Díaz Duran de Hoyos
90850
1/11/2011
Ensayo parcial 3

La Justicia en nuestra sociedad
A lo largo de la historia hemos pasado por muchas y diferentes corrientes económicas: el socialismo, comunismo, marxismo, monarquismo, feudalismo y en el que ahora nos encontramos que se expandió bastante en el continente americano en el último siglo; El Capitalismo. Pero es posible que esté llegando a su fin? Es posible que la sociedad se está dando cuenta de los incontables defectos que esta corriente tiene?
En el siglo XVII, que fue cuando surgió el Capitalismo, la idea de invertir en algo que diera beneficios, el intercambio de bienes, la libertad de elección de oportunidades y un sistema económico basado en el dinero parecía la mejor opción pero al igual que todos los sistemas que hemos experimentado el capitalismo podría estar llegando a su fin en un futuro no muy lejano. Esto se explica tan fácil como la ley de gravedad “Todo lo que sube, tiene que bajar” y como ya ha sucedido en el pasado, cuándo un sistema social carece de justicia y ética tarde o temprano llega el cambio, “la revolución” será posible que ese día este cerca como está sucediendo en países con otros sistemas que están llegando a su fin como el régimen de Gaddafi en Libia, o lo que sucedió en Egipto.
En sus orígenes la idea utópica del capitalismo probablemente no era mala pero conforme han pasado los años se ha ido generando cada vez más desigualdad social, generando que la sociedad este cada vez más dividida. El gran problema del capitalismo es que la distribución de la riqueza se encuentra básicamente en un sector muy acotado de la población, dicho de otra forma los ricos cada vez son más ricos y los pobres cada vez son más pobres. Esta inconformidad se ve en la encuesta que se le hizo a las personas de Estados Unidos en el 90 sobre que pensaban de los trabajadores de Wall-Street y la mitad respondió que eran honestos, en el 2011 solo el 26% de los encuestados opinaron lo mismo.
De estas injusticias y desigualdades surgen “los indignados” que son personas protestando inconformemente con el sistema que tanto carece de justicia, equidad e igualdad. No es justo que en los Estados Unidos las 400 familias más ricas tengan más dinero que el resto del país, dónde está la distribución de la riqueza? La igualdad social? La igualdad de oportunidades?

En México esta situación no es diferente, en realidad es mucho peor, amamos nuestro país con su cultura y tradiciones, pero social y económicamente tenemos demasiados problemas, las diferencias entre los ricos y los pobres son enormes, tal es el caso de Slim el hombre más rico del mundo que en vez de usar su riqueza para ayudar al pueblo Mexicano lo suprime más, su fortuna equivale a 74 mil millones de pesos mientras que hay personas con un salario de 40 pesos, esto es injusticia y lo que es peor es que estas personas con muy pocas facilidades y beneficios pero con mucho miedo de no comer, de no poder mantener a su familia caen en el narcotráfico, haciendo una cadena de inseguridad e injusticia, por ejemplo: una persona sin dinero vive con miedo de cómo sobrevivir, la solución incorrecta a este problema es convertirse en sicario, haciendo que las personas de clase media-alta vivan también con medio a por la inseguridad, haciendo a los únicos impunes a los jefes del narcotráfico y a los multimillonarios como lo es Slim. Hay que recordar que recientemente alcanzamos los 7 mil millones de personas en el planeta, la población mundial cree exponencialmente pero la riqueza por otro lado cada vez se centraliza en una elite muy pequeña de personas en el mundo, así que al ritmo que vamos la desigualdad va en aumento.
Pero ¿Qué estamos haciendo cada uno de nosotros para contrarrestar esto? Nada, por lo menos en Estados Unidos hay gente inconforme hablando, protestando y exigiendo justicia, en nuestro país no. Gente inocente muere diario, cada vez hay menos oportunidades de trabajo y de crecer y en realidad no hacemos nada, no exigimos nuestros derechos, y somos el porcentaje más grande del país, se supone que vivimos en un país democrático pero ni siquiera se pueden hacer pasar las leyes que son dirigidas a nosotros porque los políticos ven por ellos mismos, por hacer quedar bien a su partido y mal al otro y nosotros lo permitimos al no protestar por nuestros derechos, también hay que recordar que vivimos en uno de los países más corruptos del mundo.
Según la constitución tenemos el derecho a la educación pero para recibir una buena educación, si no cuentas con los recursos necesarios, puedes solicitar una beca que lo más probable es que te hará vivir endeudado por mucho tiempo ya que le educación pública deja mucho que desear en México. Seguro que hay mucha gente que lleva años pagando estas deudas inconformemente pero no hace nada. A este país le hace falta despertar, ser capaces de salir de la comodidad para que se den cuenta de que se puede hacer un mundo más justo. Las protestas, las marchas todo eso es aceptable mientras no se caiga en la violencia, pero no es suficiente hay que proponer soluciones si nosotros no las buscamos y las proponemos nadie lo hará por nosotros.
El Capitalismo deja mucho que desear, es tiempo de buscar nuevos sistemas, nuevas formas de justicia social, el industrialismo propuesto por Jaque Fresco es una de las nuevas tendencias que están surgiendo. El propone un sistema económico basado en los recursos naturales, eliminar el dinero que es lo que provoca desigualdad, injusticia y una de las enfermedades terminales del Capitalismo, la corrupción.




Bibliografia
El torrent, Intervención de Slavoj Zizek en Liberty Plaza Nueva York, disponible en: http://eldiariodetorrent.wordpress.com/2011/10/11/intervencion-de-slavoj-zizek-en-liberty-plaza-nueva-york/, 11/10/2011, consultado: 26 de octubre 2011.
Gomez Nadal, Francisco, Otramerica, La ficilidad de ser indignado, disponible en: http://otramerica.com/opinion/la-facilidad-de-ser-indignado/693, 17/10/2011, consultado 30 de octubre 2011.
Bendensky, leon, La jornada, Ondas desde Zuccotti, disponible en: http://www.jornada.unam.mx/2011/10/17/opinion/033a1eco 17/10/2011, consultado 31 de octubre 2011.
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