miércoles, 27 de noviembre de 2019

La investigación científica en el ambito biomédico


Marco Antonio Patiño Murillo
A01206383

La investigación científica en el ámbito biomédico


Marco Antonio Patiño Murillo
A01206383

La investigación científica en el ámbito biomédico

“Mientras los animales inferiores sólo están en el mundo, el hombre trata de entenderlo; y sobre la base de su inteligencia imperfecta pero perfectible, del mundo, el hombre intenta enseñorearse de él para hacerlo más confortable… Por medio de la investigación científica, el hombre ha alcanzado una reconstrucción conceptual del mundo que es cada vez más amplia, profunda y exacta” (Bunge, 1972). Debido a que la Ingeniería Biomédica puede llegar a áreas de investigación como parte de su formación multidisciplinaria en la búsqueda de nuevas ciencias, técnicas o dispositivos para el ayudar en la mejora de la calidad y esperanza de los seres humanos, esta está ligada a las regulaciones que los propios seres humanos han generado para legitimar dichos estudios en beneficio de la humanidad. (Núñez, 2007). Esto en relación a que las ciencias, técnicas o dispositivos creados serán posteriormente desarrolladas a fondo y utilizados para resolver situaciones en donde se involucra la vida, viendo primordial que estos sean eficaces y seguros al momento de su réplica para producción y posterior distribución, si es que se procede este último; y para que dichas características sean cumplidas, existen diversos sistemas de reglas para que estos procedimientos sean debidamente registrados, concretados y ejecutados, para así asegurar su veracidad y pueda ayudar al sector salud o científico (Bunge, 1972).
En este ensayo se hablará de como actualmente en la investigación científica existen discrepancias en la regulación, y como el Ingeniero Biomédico requiere de una forma de valoración crítica para discernir en que practicas se puede aplicar de manera efectiva la ética para así no causar o caer en situaciones que pongan en peligro la vida de los pacientes por una falta de honestidad y/o practicas amañadas; ya que se han presentado casos en los que la avaricia es prioridad, falta de información o uso irresponsable de recursos termina afectando los procesos para una buena práctica científica. Viendo necesario que se actúe tomando las categorías éticas, de ver a los seres vivos como un fin y no como medio, buscar comportarse siempre con honestidad y responsabilidad al llevar un control de información de la investigación científica.
Como objetivo de este escrito es dar a conocer los problemas éticos que acechan en el área de la investigación científica y así reconocer y combatir dichos parámetros corruptos que anidan en la actual forma de realizar investigaciones.

Palabras clave: ética, individualidad, honestidad, dignidad, responsabilidad

El término “biomédica” es utilizado en la práctica de la medicina y muchas veces sin conocer su verdadero significado (Barua, 1996, 7:1-3). Así se habla de investigación biomédica, publicación biomédica y biomedicina. Etimológicamente proviene del griego bios que significa vida y del latín medere: curar y el diccionario de la Lengua Española lo determina como medicina clínica basada en los principios de las ciencias naturales (biología, biofísica, bioquímica, etc.) (RAE, 1992), mientras que en el Webster´s II New Riverside University Dictionary, define biomedicina como la rama de la medicina relacionada con la supervivencia humana y su funcionamiento en ambientes anormales y con los aspectos médicos de protección contra ambientes adversos; también como el estudio de la medicina y su relación con todos los sistemas biológicos (1988). Con relación a la investigación, la palabra proviene del latín investigare que significa inquirir o de vestigium que significa huella (Corripio, 1979). Mientras que el pequeño Larousse define investigar como “hacer diligencias para descubrir una cosa, registrar, indagar” (García-Pelayo, 1987). La investigación científica, es metódica y sistemática, no es errática sino planeada y no excluye al azar (Bunge, 1972).
Por lo tanto, la investigación científica, es por el momento, la forma más avanzada para la generación y adquisición de conocimientos a pesar de ser falible resulta generalmente más confiable que otras fuentes de conocimiento. Siendo una de las actividades más importantes que deben desarrollar los profesionales. Como se menciona, la investigación científica debe ser planeada pero debido a la mala administración de recursos, siendo de estos parte el uso de seres vivos, se les toma como objetos de fácil descarte, como mero medio, simplemente buscando datos para las investigaciones (Comisión Nacional para la Protección de Sujetos Humanos en Investigación Biomédica y de Conducta 1993, 140-147).
El Ingeniero Biomédico encargado del desarrollo de experimentos científicos debe estar consciente y reflexionar éticamente sobre las consecuencias que sus actos causen en los individuos de sus experimentos, ya que estos pueden ser beneficiosos tanto para el paciente como para la ciencia o ser innecesarios para ambas partes.
Usando el principio del utilitarismo este habla acerca de que no importa si un ser tiene alma, es racional, sino que fuera capaz de experimentar placer o dolor. Si un ser es capaz de sufrir, entonces tenemos el deber de tomar eso en cuenta al decidir qué hacer, incluso si el ser en cuestión no es humano (Rachels, 2006).
Como se muestra en este ensayo uno de los problemas que presenta la investigación científica es el uso consciente de seres vivos para el avance de la ciencia, pero muchas veces se malgastan recursos de este tipo sin contar que son seres vivos los que se usan; y de aquí surge la duda ¿Se les respeta a los seres como individuos por su capacidad de sentir placer o dolor? La respuesta es que no, debido a que al generar practicas en donde solo se necesiten datos para el avance científico cuesta menos para los investigadores que darle autoridad a un individuo a ser reconocido como tal y este pueda negar de los procedimientos sometidos, por ende no se les respeta a los individuos por su capacidad de sentir, sino que se les somete a condiciones nefastas (Rachels, 2006, p. 157).
Concordando con la parte del utilitarismo que aborrece el sufrimiento de los seres vivos (Rachels, 2006, p.157) se han planteado convenios o informes en donde se determinan normas de conducta ética para los procesos en donde se involucren seres vivos y así evitar en gran medida el dolor innecesario, como lo es el informe Belmont, pero actualmente se han regido por una teoría del cuidado en donde el compromiso con el otro se ha visto mermado por el cuidado del “yo” al solo ser consciente del beneficio personal para la investigación más que para los individuos sometidos a los experimentos. (Comisión Nacional para la Protección de Sujetos Humanos en Investigación Biomédica y de Conducta 1993, p. 140-147).
Poniendo en desacreditación a la investigación de los Ingenieros Biomédicos, lo cual resulta increíble; ya que el fin de la ciencia, y más la investigación, es la búsqueda de conocimiento para el beneficio de los individuos. Haciendo indignantes las situaciones que se han generado por estas negativas al reconocer al otro como individuo.
Otro de los problemas que la investigación científica presenta es en la autoría de las publicaciones las cuales muchas veces postulan como autores a personas cuya contribución en el artículo es mínima y negándole el crédito de autor a una persona que es responsable de una parte decisiva del contenido del estudio, quitándole valor.
Constituyendo la autoría irresponsable, la cual va desde la ignorancia o la confusión sin mala fe y franca deshonestidad (Fotion, 1984) y la autoría injustificada, la cual es la idea de recompensa (prestigio, curricular o valor económico) para saldar deudas o simplemente y llanamente por ignorancia  debido al desconocimiento de normas y criterios y también llevan las faltas éticas de la adjudicación o aceptación del crédito por algo no hecho por ellos y utilizar ese crédito mal habido para obtener un bien mayor usando solo a la investigación como medio y no como fin. (Huth, 1984, p. 257).
Como menciona la ética Kantiana, los seres humanos tienen “un valor intrínseco, esto es, dignidad”, que los hace valioso “sobre cualquier precio”. (Rachels, 2006, p. 204). Con relación a la problemática presentada en el ensayo, se está de acuerdo que es incorrecto que a los autores responsables de las investigaciones o de partes esenciales de estas se les minimice simplemente por no tener el peso necesario ante la comunidad científica para tomar sus aportaciones como verídicas o al menos comprobables.
Relacionado a lo anterior también al ser individuos con un valor constado como dignidad que los hace valiosos como seres humanos, ¿Se debe de velar por ser honestos al momento de ser acreditados en alguna investigación científica? La respuesta es sí, debido a que la información establecida en dichos documentos podrá ayudar al avance tecnológico y científico, llegando a salvar o beneficiar miles de vidas, sean humanas o no, y cualquier infracción en los procesos de regulación por pensamientos arrogantes o innecesarios causarían efectos devastadores si estos llegaran a salir al sector salud. Como se muestra en la ética aristotélica la virtud es un rasgo de carácter manifestado en la acción habitual.  (Rachels, 2006, p. 268). La virtud según Aristóteles se genera a través de los hábitos y estos relacionados a la investigación, se dictaminarían como la generación de acciones que generen una práctica correcta de los procesos de la investigación científica.
Se tiene que tener claro que los investigadores que deciden dedicarse a las áreas relacionadas con el sector saludo tienen como meta el desarrollo de soluciones para problemas de salud; es por eso que cualquier investigación que se realice debe de generarse con una virtud de honestidad ante el desarrollo de resultados, debido a que si dicha investigación genera beneficios para los seres vivos o de lo contrario no se tendría sentido la publicación de un archivo que solo genere daños o errores a la hora de su duplicación. Generando así un estado de virtud, el cual pueda generar una autoría responsable y eficiente.
Retomando el punto de la autoría irresponsable y la injustificada, aun cuando se desarrolle una buena autoría de alguna publicación científica se puede presentar el caso de fraude científico o divulgación precoz, aunque en principio se asume que los investigadores presentan sus resultados basados en observaciones honradas y reales (Pulido, 1990, 57).
La problemática ética existente trata entorno a que el fraude científico es difícil de evitar y controlar, debido a que depende de la integridad moral y hábitos de los investigadores; Y aunque se presenten normas y protocolos para el evitar este tipo de casos como lo remarca el Comité Internacional de Directores de Revistas Médicas (1998,p. 257) no importa si una investigación es errónea, se cambia, el problema es cuando se adjudica como verdadera debido a que su implementación causara sufrimiento y/o malgaste de recursos en el sector salud.
Dejando ver que existen un gran caso de investigaciones fraudulentas por una falta a la integridad moral y ética de los equipos de investigación científica; las cuales pudieron haber sido evitadas si los integrantes hubieran actuado con virtud ante su código, tomando la verdad y siendo responsables de los procesos de documentación y administración del proyecto. Debido a que son personas a las cuales se les da la confianza de que realizaran su trabajo de la mejor manera posible par así obtener los mejores resultados o beneficios para la ciencia y el avance tecnológico. (Rachels, 2006, p. 269)
Observando que existen normas las cuales ayudan a no caer en estos hábitos y pueden generar hábitos buenos que lleven a la práctica correcta para la buena implementación de una investigación científica y así aportar al campo del sector salud. La solución en relación a esta problemática que se ha dejado ver en las investigaciones científicas, es que los investigadores se comprometan a ejercer sus votos con el desarrollo a beneficio de la ciencia y el conocimiento para el beneficio de todos, y que aquellos que inciden en actos fraudulentos o de malgaste de recursos por el bien personal no serán tolerados debido a que esto causaría efectos negativos en todos los apartados que estos toquen a la larga, siendo la salud la principal afectada.
Se concluye como Ingeniero Biomédico en desarrollo, que después de observar cómo existen prácticas en la investigación científica que son corruptas estas no pueden ser toleradas debido a que causaran un daño en la salud de todos aquellos que se sometan a dicha investigación o procesos derivados de esta; esto debido a que como un profesionista estos hábitos no pueden llevar a un camino virtuoso o de satisfacción personal. Como solución se propone el adoctrinamiento a futuros actuadores en el sector de investigación científica, para, aunque sea de manera lenta, el mejorar esta situación al desarrollar en estos un pensamiento ético que ayude a discernir en investigaciones honestas, eficaces y veraces.  

Referencias básicas:

(1993). Informe Belmont: Principios éticos y Normas para el Desarrollo de las investigaciones que involucran a seres humanos. Comisión Nacional para la Protección de los Seres Humanos en Estudios Biomédicos y del Comportamiento de los E.U.A. Rev Med Hered. 4: 140-147. http://www.conbioetica-mexico.salud.gob.mx/descargas/pdf/normatividad/normatinternacional/10._INTL_Informe_Belmont.pdf

(1998). Declaraciones del Comité Internacional de Directores de Revistas Médicas anexas a las normas de Vancouver. Comité Internacional de Directores de Revistas Biomédicas.  Rev Panam Salud Publica. 3: 257-261. Recuperado de:        http://iris.paho.org/xmlui/handle/123456789/8979

Barúa, L., et all. (1996). Definición de la medicina y su relación con la biología. Rev Med Hered 1996; 7:1-3. Recuperado de: http://www.scielo.org.pe/pdf/rmh/v7n1/v7n1e1

Bunge M. (1972). La Ciencia, su método y su filosofía. Buenos Aires: Ediciones Siglo Veinte. Recuperado de: https://users.dcc.uchile.cl/~cgutierr/cursos/INV/bunge_ciencia.pdf 

Fotion N, Conrad CC. (1984). Authorship and other credits. Ann Intern Med
Huth, E. (1984). Irresponsible authorship and wasteful publication. Ann Intern Med. 100:257-259. Recuperado de: https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/3946956

Núñez, J.(2007). Ética, Ciencia y Tecnología: sobre la función social de la tecnociencia. Reflexiones sobre Ciencia, Tecnología y Sociedad. La Habana: ECIMED.p. 301-22.
Pulido M. (1990). El aporte de árbitros y editores al trabajo científico de los autores. Bol Oficina Sanit Panam. 108(1):57-61.      Recuperado de: http://hist.library.paho.org/Spanish/BOL/v108n1p58.pdf

Rachels, J. (2006). ​Introducción a la filosofía moral. México: Fondo de Cultura Económica.

 Referencias complementarias:

Corripio F. (1979) Diccionario etimológico general de la lengua castellana. Barcelona: Editorial Bruguera SA.
    
García-Pelayo, R. (1987). Pequeño Larousse ilustrado. Buenos Aires: Ediciones Larousse.   

Real Academia Española. (1992). Diccionario de la Lengua Española. Madrid: Editorial Espasa Calpe S.A.

Riverside University. (1988). Webster´s II New Riverside University Dictionary. Boston. The Riverside Publishing Company.


No hay comentarios:

Publicar un comentario