jueves, 4 de julio de 2013

BREAKING BAD, LA ÉTICA DE WALTER WHITE


Génesis Peralta Ornelas

ABSTRACT

Se estudiaron algunas teorías éticas existentes con el propósito de aplicarlas a todos los dilemas éticos que se presentan en la vida del protagonista de la serie Breaking bad. Su nombre es Walter White, y es un brillante maestro de química al que se le detectó cáncer de pulmón y a raíz de esto y como consecuencia de su desesperación, tomó una serie de malas decisiones en su vida como entrar al mundo de las drogas y el narcotráfico, con la intención de “proteger a su familia” dejándoles un patrimonio para el futuro. Durante esta nueva etapa de su vida, lucha diariamente contra los enemigos que surgen a raíz del narcotráfico y al mismo tiempo esta en una constante lucha contra el cáncer. A continuación se manejan argumentos para cada problema ético que se presenta en esta historia, asumiendo un enfoque sustentado en la necesidad de los principios éticos aprendidos durante el curso de Ética, persona y sociedad.


La decisión de Walter White

Breaking bad es una serie de televisión que ha obtenido varios premios Emmys, tales como mejor serie, mejor montaje, mejor dirección, mejores actores, entre otros.

Esta serie narra la historia de Walter White, un maestro de Química de cierta Institución, a quien le detectan cáncer de pulmón en fase terminal, y en su mejor situación, con quimioterapias podrá sobrevivir sólo unos años más.

Recién cumplidos sus cincuenta años y después de recibir esta noticia, se da cuenta de que no le queda mucho tiempo de vida, y la desesperación por no tener un futuro asegurado para su hijo discapacitado y su esposa embarazada de una niña, lo lleva a tomar muchas decisiones que le darán un cambio radical a su vida.

Su cuñado Hank Schrader, trabaja para la D.E.A. (Drug Enforcement Administration) y en una ocasión Walter White lo acompaña a una redada. Mientras permanece en el auto logra ver a un ex alumno suyo de nombre Jesse Pinkman escapar por una ventana del piso superior y después de eso, entra al lugar, en donde conoce todo lo que se necesita tener un laboratorio en donde cocinar metanfetamina, y es ahí donde se le ocurre una idea.

Durante toda su vida, Walter White fue una buena persona y después de la noticia del cáncer se da cuenta de que nunca tuvo la opción de tomar sus propias decisiones, nunca tuvo voz ni voto en ningún aspecto de su vida, y después de la noticia se da cuenta de que es él el que tiene que decidir como enfrentar su situación.

Es ahí cuando decide aprovechar sus amplios conocimientos de química y comenzar a cocinar metanfetaminas durante el poco tiempo de vida que le queda, con el objetivo de dejar a su familia un futuro asegurado.

Pienso que no hay excusas para que una persona considere involucrase en estos actos delictivos, primeramente porque atentan contra la sociedad y en segundo lugar porque es un negocio muy peligroso, y si una persona realmente ama a su familia, ni siquiera lo pensara.

Podemos ver en los periódicos y noticieros que la cifra de consumidores de metanfetaminas lamentablemente ha ido en aumento y cada vez es más fácil su fabricación y consumo “Hace sólo unos años, fabricar metanfetaminas requería un complicado laboratorio... Pero ahora los usuarios de la droga están haciendo sus propias metanfetaminas en pequeños lotes utilizando un método mucho más rápido, barato y sencillo... el nuevo método se está esparciendo rápidamente por el país y está contribuyendo a un incremento en el número de casos de metanfetaminas” (Jouzapavicius, 2009). Para detener esta cifra y lograr que una sociedad exista como tal, cada persona tendría que ser un agente moral, que quiere decir “guiar la propia conducta por leyes universales que se apliquen, sin excepción, en todas las circunstancias” (Rachels, 2006. p.194). Con el objetivo de lograr el bien común para todos los integrantes de una misma sociedad.


Fabricar metanfetaminas

Se presenta la oportunidad de asociarse con Jesse Pinkman, (ex alumno al que vio escapando durante la redada de la D.E.A.) y el trato fue que Walter White sería el cocinero de metanfetaminas y Jesse Pinkman el encargado de distribuirla, dividiendo las ganancias en un 50% para ambos. 

Dilema ético 1:

¿Es correcto que Walter White haya tomado la decisión de fabricar metanfetamina a raíz de enterarse de su estado de salud, con el fin de dejar dinero para su familia cuando él ya no esté?

Walter White, tomó la decisión de ocultarle todo a su familia, incluyendo la noticia de que le habían diagnosticado el cáncer pulmonar. “Si mentimos a otras personas, sufriremos todas las malas consecuencias de tener una mala reputación” (Rachels, 2006. p.137). Cuando Walter White comenzó con la fabricación de metanfetaminas le mentía a su familia cada vez que salía a cocinar. Su esposa sospechaba de que algo ocultaba y esta desconfianza primero provocó conflictos familiares y al final terminó separando a la familia. Contestando la pregunta, pienso para Walter White estaba muy claro que no estaba haciendo lo correcto, pues de ser así no tendría porque mentir ni ocultar sus actos ante su familia.

Por otro lado, “La opresión de las mujeres y la violación de sus derechos es un problema heredado que todavía sigue siendo alarmante” (Gil, 1999. p.150). Este problema ético surge por la perspectiva machista de Walter White, pues no está considerando que cuando él no esté su esposa puede sacar adelante a la familia, prefiriendo entrar al mundo de las drogas, sin pensar en las consecuencias negativas que le va a generar a la sociedad.

Durante todo este proceso y cuando comienza con su nueva vida en el mundo de las drogas, se siente vivo, a pesar de todos los riesgos a los que se enfrenta, pues al fin puede tomar sus propias decisiones sin tener que consultar a nadie. Pero nunca tomó en cuenta que “el desarrollo no es un mero crecimiento económico, sino que comprende también un progreso social y cultural con un objetivo final de justicia” (Fernández, 1997. p. 691). Walter White se fue por el lado del mero crecimiento económico, dejando por un lado el progreso social y la enseñanza cultural que podía dejar a su familia, y los actos injustos que cometió lo fueron obligando a alejarse cada vez más de su familia, perdiendo la oportunidad de morir como una persona digna ante su familia y ante la sociedad.

Una de sus condiciones que se puso al iniciar con esta nueva etapa, fue que no estaría involucrado con nadie de ese medio, él únicamente cocinaría la metanfetamina. Pero después de un tiempo la situación se fue haciendo más complicada, y tuvo que involucrarse un poco más, dándose cuenta de que no es tan fácil como sólo cocinar y distribuir.


Robar para cocinar

Walter White y Jesse Pinkman, están teniendo mucho éxito y están produciendo más metanfetamina de lo que ellos mismos pudieron haber imaginado. Pero pronto se tuvieron que enfrentar a un problema; la escasez de un ingrediente muy importante. Es ahí donde se ven en la necesidad de robar un tren de carga que transportaba este ingrediente, involucrando a más personas para la realización de este acto.

Dilema ético 2:

¿Es correcto que Walter White decida robar un tren de carga con la intención de obtener un ingrediente que necesita para seguir cocinando metanfetamina?

Desde una perspectiva ética, la justicia es el valor nuclear en todas las relaciones humanas y el criterio que sirve para juzgar la adecuación o no de las conductas a la dignidad de la persona; rectitud de conducta con y hacia los demás y rectitud interior (ser lega, recto)” (Gil, 1999. p.151). Al igual que la fabricación de metanfetaminas, robar también es un acto ilegal, y queda completamente alejado de ser un acto ético. Pienso que independientemente de las metanfetaminas, robar para satisfacer una necesidad esta mal, porque si fuera una acción correcta todas los individuos vivieran del robo y como sociedad sabemos que eso no es posible, puesto que siempre existiera el caos y no pudiéramos vivir en paz.

Por otro lado, también esta la parte del egoísmo ético que nos conduce a la siguiente Regla de Oro: “no debes hacer a los demás lo que no quieras que te hagan porque si se lo haces, los demás muy probablemente te lo harán” (Rachels, 2006. p.137). Aplicando este principio de Hobbes al robo que comete Walter White, nos damos cuenta de que es un acto anti ético porque a nadie nos gustaría que nos roben. Y tomando en cuenta de que el robo se le podría regresar, es un cuento de nunca acabar.

Y si lo vemos por el lado en el que “La justicia está íntimamente relacionada con la honestidad y sinceridad, con el comportamiento responsable en el trabajo, conducta recta en los negocios, en el servicio público y en la policía” (Gil, 1999. P.159). Nos damos cuenta de que no se puede ser justo si se roba el esfuerzo y trabajo de otras personas, es una conducta irresponsable y muy lejos de ser una actitud honesta, sincera y recta en los negocios. Pienso que si Walter White hubiera pedido al dueño del tren que lo apoyara con el ingrediente que estaba necesitando, seguramente se lo hubieran negado, y con esto comprobamos que el robo cometido fue un acto injusto, que atentó en contra el dueño del tren.

Pero los conflictos no acabaron ahí, al mismo tiempo que se iban expandiendo, también se iban presentando más problemas y cada vez más complicados de resolver, al grado de involucrar sus propias vidas.


Su vida o la mía

Walter White y Jesse Pinkman se enfrentan a muchos problemas con narcotraficantes que se molestan por su presencia en el mercado, pues su producto se está posicionando rápidamente por encima de los que ya estaban establecidos. Con sus actos han ganado muchos enemigos, y en ocasiones su única opción para poder sobrevivir es matar a quienes considera sus principales enemigos y a quienes se atreven a amenazarlos con acabar con su vidas y en el caso de Walter White con las de su familia.

Dilema ético 3:

¿Es correcto que Walter White y Jesse Pinkman maten a personas para defender sus propias vidas y las de su familia?

“Hay algunas reglas morales que todas las sociedades deben tener en común, porque esas reglas son necesarias para que la sociedad exista. Las reglas contra la mentira y el asesinato son dos ejemplos” (Rachels, 2006. p.53). Si dentro de una sociedad la gente miente y asesina, los integrantes de ésta vivirían con miedo, afectando la paz y la tranquilidad de las personas. Y si estos actos se cometen con mucha frecuencia la sociedad no podría existir.

Los eticistas apelaron al principio de que es incorrecto matar a una persona para salvar a otra” (Rachels, 2006. p.22). Es incorrecto matar a una persona incluso aunque sea para salvar nuestra propia vida, principalmente porque “Todos los seres humanos nacen libres e iguales en dignidad y en derechos. Están dotados de razón y de conciencia y deben obrar los unos para con los otros con espíritu de fraternidad” (Gil, 1999. p.153). Si todos los seres humanos tenemos el mismo valor y los mismos derechos, una persona no debería decidir quien vive y quien muere. Además, esta situación es una consecuencia de sus actos y es un riesgo que tiene que aceptar porque nadie lo obligó a que cometiera estos actos delictivos en contra de la sociedad.

Y por último, “En el contexto del discurso jurídico y sociopolítico se habla de justicia como algo que es de derecho, de justicia conmutativa, natural, social, distributiva, económica, contributiva y política” (Gil, 1999. p.151). Si hay asesinatos no existe justicia dentro de una sociedad, ya que se necesita la igualdad, la tolerancia y la libertad. Pero si los asesinatos dejaran de existir, todas las personas nos sentiríamos más felices y seguras en nuestra sociedad.

La vida frente a la cual se moldean los valores no debe ser entendida aquí como la vida orgánica del hombre, como su propia conservación a la manera de Hobbes, sino como la búsqueda de vida de proyectos humanos y de ideales propios” (Mejía, 2006. p.37). Probablemente si estuviera en la misma situación que Walter White en donde me estén amenazando de muerte, si prefiriera salvar mi vida. No estoy diciendo que estoy de acuerdo con que Walter White cometa estos asesinatos, simplemente estoy diciendo que si se prestara la ocasión muy probablemente si prefiriera salvar mi vida. Pero específicamente para el caso de Walter White sigo estando en contra, ya que estos riesgos y amenazas son consecuencia de sus malas decisiones.


CONCLUSIÓN

Pudiera continuar con infinidad de dilemas éticos que se presentan en esta serie, pero escogí los principales y los que ocurren con mayor frecuencia.

Concluyo con mi idea de que no estoy de acuerdo con la delincuencia organizada, aunque podría tratar de entender a Walter White cuando tomó esta decisión tan drástica, pero no significa que esté de acuerdo ni que lo apoye. Su objetivo siempre fue ahorrar dinero y una vez que lo lograra dejaría este trabajo. Pero algo que no tomó en cuenta es que el narcotráfico no es como cualquier otro trabajo del que puedes entrar y salir cuando quieras, principalmente porque hay mucha gente mala en esos medios y en la mayoría de los casos cualquier cosa que hagas que no le parezca a alguien es motivo suficiente para asesinarte.
Por otra parte, si viviéramos en un mundo en el que cada persona que es diagnosticada con alguna enfermedad terminal, comenzara como narcotraficante para dejarle un mejor futuro a su familia, nuestra sociedad no valdría nada.

Conozco a personas que tienen enfermedades terminales y siguen trabajando muy duro como lo han hecho toda su vida, pienso que tenemos mucho que aprender de estas personas, ya que no es fácil vivir este proceso y aún así seguir siendo buenas personas, respetando los valores y los derechos humanos de todos los demás.

Finalmente concluyo con una frase que aprendí durante la elaboración de este ensayo “Debemos de observar nuestros resultados para saber si nuestras acciones fueron buenas o malas, y aunque en ocasiones estemos esperando resultados positivos, eso es algo que no podemos saber”.


Bibliografía

James Rachels. (2006). Introducción a la filosofía moral. México: Fondo de la Cultura Económica.

Alberto Hernández. (2006). Ética actual y profesional. México: Thomson

Francisco Mejía Uribe. (2006). El fin de la moral y la revitalización de la ética. Revista de Filosofía de la Universidad del Norte, 4, 39.

Ramón Gil Martínez. (1999). La justicia. En Valores humanos y desarrollo personal (149-171). Madrid: Escuela Española.

María Encarnación Fernández Ruíz-Gálvez. (1997). Derechos humanos : ¿Yuxtaposición o integración?. España: Universidad de Valencia.

José Morales. (2004). Dewey, moralista en acción. Red de revistas Científicas de América Latina, El Caribe, España y Portugal, 5, 10. 


1 comentario:

  1. Lo que estás haciendo aquí es un análisis moral, no ético, que no es lo mismo.

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