¿Se deben impartir clases de ética en las escuelas financieras?

No hay problema que se origine de la nada. Todo acto tiene su consecuencia y como bien dicen “lo que mal empieza, mal acaba”. En la actualidad vemos como los principios en los que se fundamentan la economía actual son nulos y los esfuerzos que se realizan por hacer un cambio se encuentran con grandes obstáculos. Parece ser sencillo identificar el problema pero llegar a la solución un tanto imposible. No sólo son aspectos económicos los que no dejan que la situación cambie, los intereses personales y las prioridades de los más influyentes luchan porque todo siga igual, a pesar de ya estar sufriendo los daños de un sistema que solo beneficia a algunos cuantos.

En el documental “Inside Job” podemos ver claramente como el poder está en unos cuantos y estas personas pueden hacer con las leyes lo que más les convenga. Su prioridad es el dinero, obtener las mayores ganancias. La base del capitalismo es esa, siempre crecer, no importa como, siempre que estés bajo normativa legal. La pregunta que nos planteamos constantemente ¿La normativa legal es lo suficientemente amplia para resolver todo? Lamentablemente no lo es así. En especial los dilemas éticos no se pueden supervisar bajo las leyes y estas mismas se contradicen. ¿Cuál es el problema de ser mejor cada día y tener un sistema más efectivo? Ninguno, el problema es como llegaste a ese sistema. No porque no hayas infringido ninguna ley significa que lo que estés haciendo sea correcto. Siempre existirán “vacíos legales” que las grandes corporaciones aprovecharán para sacar ventaja en algo que saben que es incorrecto pero que todavía no se ha marcado como tal. Es algo que vemos claramente en el documental, donde los académicos prestan sus servicios para resolver las fuertes demandas que éstas recibían.

 

Esto nos lleva al siguiente punto que pudimos analizar en las lecturas de la semana. ¿Se deben impartir clases de ética en las escuelas financieras? La respuesta es sí. Un estudio de Aspen Institute comprobó en 2000 estudiantes de primer año que la creencia que la responsabilidad de una corporación debería ser aumentar su valor creció del 68% al 82%, al graduarse (Etzioni, 2002). ¿Por qué no pensar como prioridad el desarrollo de la sociedad? Las acciones de estos graduados van encaminadas al beneficio propio y eso al final no traerá ningún bueno resultado. No se puede tener eso como prioridad, ya que nos llevará a tomar decisiones que afecten a los demás sin que nos importe y nos debería importar. Al final lo que hagamos repercute en el presente y en el futuro, todos estamos relacionados de cierta forma. El hecho de que las empresas siguieran vendiendo acciones malas, cuya calificación aparecía como buena, al final los llevo a la quiebra.

 

“Lo que maximiza el ingreso para los más eficientes jugadores en el corto plazo exprime a los compradores en el largo plazo” (Wallerstein, 2012). Lo que aparentemente parece ser lo mejor en este momento, mañana puede convertirse en un enorme problema. No hay que pensar solo en tener las mayores ganancias ahora, hay que ver la forma en que podemos seguir creciendo toda la vida. Si una parte de la sociedad se queda rezagada, no podremos seguir avanzando. Claramente es mucho más difícil construir basándonos en el bienestar común pero genera una mayor satisfacción que no solo dura unos cuantos años, es para siempre.

Fuentes consultadas

Amitai, Etzioni. "Cuando Se Trata De ética, Las Escuelas De Negocios Reprueban." N.p., 4 Aug. 2002. Web. 27 Aug. 2012. .

Wallerstein, Immanuel. "La Recuperación Económica Que No Está Ocurriendo." La Jornada, n.d. Web. 27 Aug. 2012. .