Sembrando Amor en los Padres

De acuerdo con nuestros ideales, los integrantes del grupo estudiantil FOLI del ITESM Campus Guadalajara y la Asociación Civil Narices Rojas Guadalajara A.C., realizamos actividades de voluntariado cada domingo, dentro de las instalaciones del Centro Médico de Occidente. En dichos eventos, se pretende sembrar el compromiso por mejorar la calidad de vida de Niños y Jóvenes con cáncer.

Además de este proyecto donde convivimos con ellos haciéndoles pasar un momento agradable brindando compañía y diversión este sábado 19 de febrero, organizamos la cena del día del amor y de la amistad que tuvo como objetivo reactivar esa chispa de amor en los padres, personas que son pilares importantísimos en la recuperación de nuestros niños.

La actividad que realizamos este fin de semana tuvo un blanco diferente, pudimos generar un lazo de amor entre los padres en momentos difíciles. En esta ocasión nos pudimos dar cuenta de otras necesidades que existen en este medio, ya que tuvimos un acercamiento más cercano con ellos, y vimos en las carencias en las que se encuentra el hospital cuando llega la noche. La incomodidad de los padres, el no tener donde descansar un poco, generó inquietudes entre nosotros en las que empezaremos a trabajar para poder generar espacios más agradables para los acompañantes de nuestros niños en el hospital.

Reflexión ética (relacionar con las teorías éticas conocidas hasta ahora, haciendo una conclusión profunda sobre los imperativos éticos vinculados, tanto individual como colectivamente):

La actividad realizada este fin de semana buscaba el poder reactivar la chispa de amor en los padres ya que ellos son fundamentales en el desarrollo de sus hijos. En este periodo en el que ellos se encuentran pasa lo que dice Gilligan, Dan todo por los demás (En este caso sus hijos) pero no ven por sí mismos. Esta actividad les recordó que también son importantes, que también deben darse ese pequeño tiempo para convivir, para amarse y llenar el corazón de fuerza para seguir luchando, no perder su ser, sino hacerlo cada día más grande.

Edson Alberto González Hernández