Ética profesional
Es cierto que hablar de ética profesional muchas veces implica más casos que van más allá de lo justo. Lo que debes hacer, lo que se te recomienda y lo que es correcto.
Muchas veces, y como lo dice Horta en la lectura, estos términos tienen una doble finalidad en donde no siempre tenemos que ser buenos y confiados hacia con la empresa con la cual trabajamos o hacia la gente que servimos. No siempre tenemos que olvidarnos de nosotros y dejar que la manipulación de los términos éticos influyan en decisiones que inevitablemente terminarán por perjudicarnos.
En cierta forma lo que el autor expone es que nadie es tan bueno ni tan sabio y que obviamente tenemos que tenerle cierta lealtad a la empresa a la que vamos a trabajar y a nuestra formación ética, sin embargo en muchos casos nos pondrán en riego para salvar la empresa y ella misma lo avalará. Estos actos y decisiones internan implica riesgos profesionales y una lucha con nosotros mismos pero nunca deberíamos ir por encima de nuestros principios y formación. Obviamente tenemos que ponernos nosotros por encima de cualquier cosa y tomarnos como prioridad. Porque existen empresas (sin generalizar) que utilizan a las personas como objetos y esas personas “agradecidas” o “necesitadas” no ponen un alto y no exigen un trato mucho más humano y justo, por ejemplo, empresas que hacen trabajar más horas excediendo la jornada normal sin pago extra o empresas que piden exponer nuestras propias vidas por la marca o por el nombre de la empresa que nos “avala”. He ahí en donde nosotros tenemos que ver que tan ético es permitir que nos utilicen y que tan ético es declinar esa oferta y seguir desempeñando algunas de esas actividades de las cuales recibimos solamente abusos y exposiciones sin ninguna gratificación o reconocimiento. No siempre la ética las personas la enfocan o aplican de una manera correcta es ahí en donde nosotros y nuestra conciencia humana entra en acción para hacernos reaccionar y darnos cuenta de que lo que nos proponen o a lo que nos exponen es o no correcto y profesional.
Por ejemplo en mi carrera que es arquitectura no seria ético construir casas de mala calidad, aunque en un principio pudiéramos excusarnos que las casas son para gente de bajos recursos y que brindaría la posibilidad de que esa gente tal vez adquiera estas casas y tendría un techo a donde meter a su familia, tendríamos que ver más a fondo que después de unos años debido a la mala calidad de los materiales y estructura, expondríamos la vida de esas familias. Habiéndolos engañado y quitado su dinero al vender construcciones de mala calidad, letales y posiblemente acabando con una muy buena parte de sus ingresos en muchos años por el cobro de la misma.
En Guadalajara contamos con el colegio de arquitectos mismo que aval obras y ofrece diferentes cursos y post-grados para la buena preparación de este profesional. (disponible en www.colegiodearquitectos.org.mx, consultado el 31 de mazo 2011) y a nivel país contamos con la cámara mexicana de la industria de la construcción.
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