martes, 8 de marzo de 2011

Suicidio asistido de un ser no racional. German Fernandez 01080227

Durante la Edad Media el término “Eutanasia” toma un papel importante en la historia, pero un papel no aceptado por la religión. En esta época hasta ayudar a la salud individual era un pecado, pero con el desarrollo de nuevas técnicas y tecnología se han tomado nuevos papeles en cuanto a mejorar la salud del individuo y crear alternativas para “vivir más”, o en el caso de la eutanasia desear morir para dejar de sufrir.

En muchos países el termino Eutanasia sigue siendo sinónimo de matar o incluso un pecado mortal, pero la eutanasia no se relaciona en nada con asesinar a otro ser, simplemente es el “Derecho a Morir”, dejar descansar a un ser humano que está sufriendo. Claro está, que existen casos que dicho ser humano no puede hablar o no puede pedir que acaben con su sufrimiento, pero las personas a su alrededor saben que está sufriendo y muy en el fondo saben qué sería lo correcto en estos casos.

Un ejemplo claro de esto es un suceso ocurrido en el barrio de Queens en Nueva York, una madre hispana argumenta haber matado a su hijo de 38 años quien sufría de parálisis cerebral porque éste se lo pidió. En Nueva York, matar por piedad es ilegal así que la madre de 57 años de edad enfrentará cargos criminales.


Según los términos de la teoría utilitarista dónde lo que importa es la felicidad e impedir el sufrimiento de las personas; la Eutanasia en este caso es una opción para buscar la felicidad, desde este punto de vista el muchacho gracias al apoyo de su madre encontró un alto a su sufrimiento ya que este no quería seguir en una silla de ruedas por el resto de sus días y sí hablamos de una felicidad en general, el muchacho también buscaba la felicidad de sus seres queridos al no querer seguir siendo “una carga” para los demás y disminuir sufrimientos a la sociedad en este caso su familia.


Pero cómo se vería este caso según la teoría de Kant, dónde la individualidad no importa, el hombre no es autónomo para decidir sobre su vida, ya que no se puede utilizar un principio como fundamento de la destrucción del mismo. Claro está que la madre debería de ser condenada por lo que hiso ya que si lo vemos desde este punto de vista ella cometió una falta a las reglas, y así fue como sucedió, la madre fue castigada por su crimen, pero ¿en realidad fue un crimen?


Aquí es donde se contraponen las dos teorías, es dependiendo de qué punto de vista veas las cosas es como se castigará, en mi opinión antes de juzgar debemos de analizar el por qué de las cosas, no debemos de tomar una posición sin antes investigar el motivo y el fin al que se quiere llegar.

Desde un primer punto de vista claro que yo juzgaría a la señora por haber matado a su hijo si pensamos desde un ángulo de la perspectiva de Kant, pero en cuanto a la perspectiva de Mill, ¿no hizo la madre lo correcto? Yo pienso que sí, tal vez apuñalarlo es un poco drástico, o sádico pero al final el objetivo es el mismo, la felicidad en general. La madre y la familia del muchacho día tras día durante 38 años observaron a su hijo sin poder correr, jugar e incluso hasta interactuar con otros, solo veían tristeza en su mirada y ella entendió que lo que su hijo necesitaba para ser feliz era terminar con su vida y lo ayudó a alcanzar la felicidad.


Fuente: http://www.impre.com/eldiariony/noticias/2011/3/4/madre-asesina-a-su-hijo-minusv-242864-1.html#commentsBlock

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