Mauricio Muñoz Padilla
A01152777
Tecnológico de Monterrey Campus Guadalajara
Ética, Persona y Sociedad.
ABSTRACT:
Durante mucho tiempo, la cultura
“pop” y sus derivaciones han sido una gran inspiración para las generaciones
menores de estos tipos de artistas. Tanto con músicos y cantantes como con
actores y artistas, incluso también con algunos escritores y pintores, se ha
creado una afición hacia ellos, ya sea por su increíble talento al hacer a lo
que se dediquen cada uno de estos, o simplemente por ser atractivo.
Pero, ¿todos los ejemplos que estas
“estrellas” reflejan a sus admiradores son correctos? ¿Estos artistas siempre
siguen una conducta adecuada que pueda afectar de manera positiva a sus propios
admiradores? ¿A qué conductas éticas están apelando estas llamadas
“celebridades”? Estas preguntas me dispongo a responder en este ensayo, el cual
habla sobre muchas de las actitudes y acciones que los artistas más populares
del momento dan como ejemplo a los niños y adolescentes alrededor del mundo.
Palabras clave: ética, figuras públicas,
fanatismo, niños, celebridades, drogadicción, alcoholismo, educación, obsesión,
malos ejemplos, moda, música, internet, adolescentes.
DESARROLLO.
Según la United Nations International Children's
Emergency Fund (UNICEF),
el 63% de los niños del mundo entre las edades de 15 y de 16 años han fumado
alguna vez; el 91% ha ingerido alcohol y el 14% ha usado drogas ilícitas como
por ejemplo la marihuana y la cocaína. (UNICEF, 2010). Este es un índice muy
alto y conforme el tiempo pasa, la cantidad de menores de edad que ingieren
estas sustancias son cada vez mayores.
Esto puede tener diversas causas. Por ejemplo:
problemas familiares, como alcoholismo, drogadicción, divorcio de los padres,
maltrato físico y mental, pobreza, entre otras. Sin embargo también influye en los malos ejemplos que el mundo de
la “cultura pop” da al resto del mundo. Ya que los niños y jóvenes desean
llegar a ser como estas “súper estrellas” y por lo tanto imitan sus acciones. Una
de las consecuencias que se pueden derivar de estos hechos es que los niños
sean más rebeldes y estén en contra de sus padres y por lo tanto no terminen
sus estudios y sean condenados a no poder conseguir un trabajo decente en su
vida. (Llorca, 2008).
Que los jóvenes
y niños sigan el ejemplo exacto de su ídolo causa que estos jóvenes no desarrollen
su identidad propia y por lo tanto no puedan generar una personalidad de ellos
mismos, si no que tengan la misma forma de ser, de actuar y de pensar que los
artistas modernos. Los jóvenes se relacionan con estos modelos de persona
porque, ya sea en sus canciones, en sus videos o en películas, ellos buscan
reflejar las vivencias de la adolescencia y por lo tanto se sienten identificados.
(Rodas, 2013). Entre los adolescentes más populares en la industria de la
música se encuentran Miley Cyrus, Justin
Bieber, One Direction entre infinidad de otros. Pero ¿estos modelos a
seguir son realmente buenos para los jóvenes? ¿De verdad dan un buen ejemplo
para ellos? En muchas ocasiones las respuestas a estas preguntas es no, ya que
se atenta contra la dignidad de los jóvenes e incluso contra el bienestar de los
mismos. Se considera este comportamiento como un fanatismo.
El fanatismo es
una forma de evitación del crecimiento personal, un fracaso del desarrollo y de
la autoactualización. (Sánchez, 2003, 160-161). El fanatismo no es un término
nuevo en el mundo de la ética, siempre ha sido un tema delicado y que ha
causado mucha controversia. Hay diferentes tipos de fanatismos: religioso,
político, deportivo, hacia un pasatiempo y fanatismo a una persona a quien se
idolatra (Universidad Central de Venezuela, 2009). De los fanatismos más
conocidos en el mundo está el del grupo inglés The Beatles en los 70’s, en los 80’s la banda estadounidense de
rock Metallica, en los 90’s las
famosas “boyband” estadounidenses por
ejemplo Backstreet Boys, N Sync, etc.
Y en nuestros días personajes de los ya mencionados anteriormente.
Según Hoffman:
“[…] Los fanáticos son autómatas (Persona
estúpida o excesivamente débil, que se deja dirigir por otra, R.A.E., 1995)
porque se evalúa a sí mismo como pieza de un engranaje que lo ampara, responde
de sus acciones por él y le reconoce como medio para un fin […]”. (Hoffman, 1993, 171).
En el momento en
que una persona tiene fanáticos y los usa para su propio bien, se está
atentando contra la dignidad de los mismos fanáticos. En el capítulo 10 del
libro “Introducción a la filosofía moral”
de James Rachels (Rachels, 2010), se habla sobre la teoría de la ética
kantiana. Una de esas éticas es el de la idea de la dignidad humana a la cual
los artistas atentan. La mayoría de los artistas más exitosos de nuestros días
utilizan a sus fanáticos como medios para conseguir un bien para su persona.
Usan a los fanáticos como medio para conseguir fama, dinero, status social
entre muchas otras. Sin embargo, si aplicamos la misma teoría de la dignidad
humana, las personas comunes y corrientes también utilizan a los artistas para
un bien propio. Por ejemplo, al acudir a los conciertos se está utilizando a la
banda o al artista como medio de entretenimiento del espectador, que al final
de cuentas se considera como un atentado contra la dignidad del artista.
En el año 2013
la disquera RCA Recods junto con la cantante Miley Cyrus pusieron a la venta el
disco “Bangerz” que contiene la
conocida canción llamada “We can´t stop”
la cual habla sobre no preocuparse de nada, divertirse etc. Sin embargo hay una
parte de la canción en la que demuestra implícitamente el consumo de drogas: “[…] Trying to get a line in the bathroom […]” (Billboard, 2013). Como esta canción está en línea,
cualquier persona con acceso a internet puede escuchar la canción e incluso ver
el video. Como cada vez más niños y jóvenes tienen acceso a un Smartphone o a
un dispositivo móvil, no tienen límites en cuanto a información lo cual puede
ser muy peligroso ya que consideran que “inhalarse una línea” es de lo más
correcto. Pero aquí debemos de considerar el principio aristotélico, que dice
que mientras una acción te haga virtuoso o te haga obtener una virtud buena,
esta es correcta (Rachels, 2010). Por lo tanto, si a esta cantante la hace
feliz utilizar drogas ilícitas, está bien que lo haga. Pero al consumir estas
drogas, ella misma atenta contra su integridad física y mental.
Para poder
hacer frente a los modelos a los que están expuestos los jóvenes de hoy en
día se necesita imponer la arbitrariedad
cultural y “vencer las resistencias de las formas
culturales antagónicas” (Denardi, 2013, 44-45).
Una de las herramientas fundamentales para poder aplicar la
arbitrariedad cultural es el uso de la violencia simbólica. Esta se
define como la capacidad de imponer significados e imponerlos como legítimos
(Denardi, 2013, 47). Pero al momento de imponer una idea, un pensamiento o una
técnica se atenta contra el principio de los individuos hábiles y de las
personas integras, el cual establece que los padres deben de transmitir
habilidades técnicas para que las nuevas generaciones sean capaces de
defenderse en la vida y alcancen un nivel elevado de bienestar (Cortina, 2010).
De modo en que si impones una idea en un niño y haces que la acepte sin
cuestionarla, se le estaría quitando el privilegio de que ese niño genere sus
propios juicios y que pierda permeabilidad al engaño de la sociedad en la que
vivimos. Pero si los padres actuaran de manera correcta, es decir,
preocupándose por la educación moral de su hijo, con el tiempo se podría llegar
a una creación de personas integras que no recurrirían a ídolos falsos como
modelos a seguir, si no, verían a sus propios padres como los modelos a seguir
y se llegaría a una sociedad más justa y equitativa.
Al analizar estos casos, nos
podemos dar cuenta que en muchas ocasiones (si no es que en todas) los modelos
a seguir que los medios de comunicación junto con la industria musical y la
cinematográfica provén a las generaciones menores, quienes los siguen para
poder llegar a ser como ellos, causan un impacto negativo en los jóvenes y que
por lo tanto no crecerán de manera adecuada con respecto a su vida personal, ya
que estarán siempre basados en lo que sus ídolos hagan. Pero si desde el
principio se enseñan los valores morales a niños, se podría llegar a cambiar la
sociedad del futuro.
REFLEXIONES
FINALES.
Yo considero que para poder
frenar de manera considerable el mal ejemplo que estas celebridades el primer
paso depende de los medios de comunicación, ya que estos son los que proveen la
información tanto en fotos como en videos, los cuales llegan fácilmente a las
nuevas generaciones que cada vez son más diestros en el manejo de laptops, Smartphones e incluso del internet mismo.
Por otra parte, las familias
deben de tener un mayor control de sus hijos. Saber a qué están expuestos por
la cantidad de información que poseen en sus manos. Y relacionándose con esto,
que las familias tengan una mejor educación moral, que entiendan cuáles son las
virtudes que les quieren enseñar a sus hijos ya que estas son las que van a
desarrollar con el paso del tiempo.
Para concluir, yo considero
que las “estrellas” actúan de una manera desagradable porque el gobierno no
hace nada para detenerlos, ya que como saben que tienen dinero y son
“importantes” en cierto sentido, están por encima de la ley. La cual afectaría
a cualquier otro ciudadano común y corriente. Y también creo que si no hubiera
gente que las apoyará de una manera exagerada, no se les subiría la fama y
tampoco tendrían la necesidad de actuar así.
Con respecto a la ética, una
vez que analizamos varias teorías de cómo debe de actuar el hombre, me di
cuenta de que hay muchas que dicen que lo que te haga feliz a ti, y mientras no
lastimes a los demás, es lo que está bien y es lo que se debe de hacer. Sin
embargo, hay otras que dicen que el mundo ideal está regido por las virtudes
que adquieres con el tiempo, y otras que dicen que sólo debes enfocarte en ti
mismo, en no hacer nada para los demás, sea bueno o malo. Pero yo considero,
una vez analizando todas las teorías éticas antes mencionadas, que el bienestar
mutuo es lo que se necesita para poder vivir en una sociedad equilibrada y en
armonía. Por lo tanto, así las autoridades como las cabezas de las familias,
tienen que empezar a cambiar la situación de los ejemplos que los jóvenes
tienen, ya sea tratando a estas celebridades como personas normales y no
dándoles un trato especial, o educando bien a los jóvenes para que no sean
víctimas de la mercadotecnia y no se hagan fanáticos. Ya que estos jóvenes son
los que al final de cuentas se encargarán de la sociedad en la que vivimos hoy
en día, y por eso es importante de una vez moldear a las generaciones
siguientes para que algún día sean capaces de decidir por sí mismos su futuro y
la calidad de vida en la sociedad en la que vivirán.
REFERENCIAS BÁSICAS.
Cortina, A. (2010) Ética discursiva y Educación en valores. Madrid:
Anaya.
Denardi, L. (2013). La cultura popular entra a la escuela:
proyecto pedagógico, habitus y educación. México: Eduvim.
Rachels, J. (2009). Introducción a la Filosofía Moral. México:
F.C.E.
Sánchez, T. (2003).
Paradojas existencias y emocionales de las personalidades fanáticas. Clínica y Salud. 14, (2) pp. 157-181.
Recuperado desde: http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=180617969002
Universidad
Central de Venezuela. (Septiembre, 2009). Culturas populares y diversidad
cultural: Una experiencia de legitimación y promoción de tradiciones venezolanas,
a través de mesas técnicas con comunidades. Revista
Venezolana de Economía y Ciencias Sociales. 15, (3) Recuperado desde:
http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=17721700011
REFERENCIAS COMPLEMENTARIAS.
Cortina, A. (1994) La ética de la sociedad civil.
Madrid: Anaya.
Llorca,
R. (2009). Hijos Rebeldes…. ¿Con o sin
causa? España: Alicante
Rodas, D. (Julio, 2013). Ídolos adolescentes:
Euforia, fanatismo y locura. Pipl. Recuperado:
desde: http://www.pipl.cl/idolos-adolescentes-euforia-fanatismo-y-locura/
Debo decir que tu ensayo me sirvió bastante para cumplir con el mío, gracias por escribirlo. Éxito.
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