Las tecnologías prohibidas en el deporte y la moral
Introducción
El deporte ha
sido uno de las actividades humanas más importantes de todos los tiempos ¿A
quien no le gusta ver a su equipo favorito o a si atleta preferido participar
en algún encuentro o competición importante? Sin embargo, la decepción viene cuando
un día en la mañana vez en primera plana al jugador que más aprecias acompañado
del encabezado “Mentiroso” o “Falso”, esto a causa de su relación con el dopaje
u otro aditivo tecnológico ilegal en el deporte profesional. Y,
desafortunadamente, año tras año esta relación de jugadores con la utilización
de sustancias prohibidas va en aumento, pero, la pregunta es, ¿realmente es
mala la ayuda de tecnologías extraordinarias como el doping u otras tecnologías
que ayudan al rendimiento físico de los atletas? Yo respondería de la siguiente
manera, planteando la siguiente tesis: las alteraciones tecnológicas ilegales
en el deporte no debe ser practicado porque afecta la competencia, la salud y
otros aspectos morales.
Desarrollo
Principalmente, la razón por la que la
mayoría de la gente desaprueba el uso de las tecnologías ya mencionadas,
incluyéndome a mí, es porque es nocivo contra la salud. Para fortalecer el
argumento pasado, véase la siguiente sita: “la mayor parte de las prácticas de
dopaje perseguidas son perjudiciales para la salud y es deseable que las
políticas de información y de concienciación sobre los riesgos que comportan
sean eficaces” (Treviño, 2012). Se ha
probado científicamente el daño que causa a las personas el ingerir sustancias
para el mejoramiento del rendimiento físico. Llegando a los extremos, las
personas que se dopan pueden alcanzar consecuencias como “Florence
Griffith Joyner que, de forma sorpresiva, el 21 de septiembre de 1998 y con tan
sólo 38 años, moría víctima de una apoplejía cerebral. Su temprana muerte relacionada
con los productos consumidos en su etapa como atleta” (Treviño, 2012). No obstante, este argumento de que las tecnologías
prohibidas en el deporte dañan la salud, ha tenido objeciones como que “los
implantes mecánicos nacieron con un evidente objetivo terapéutico y
restaurativo de las capacidades físicas de los deportistas pero pueden tener
efectos mejoradores del rendimiento físico”(Treviño, 2012). En pocas palabras, esto quiere decir que los
deportistas se dopan para curar algún tipo de enfermedad y que,
sorpresivamente; sin que ellos lo quisieran, presentan un mejor desempeño en
sus actividades deportivas pero “no cabe duda de que no se trata de hechos
esporádicos, dada la frecuencia con la que casos muy notorios son conocidos” (Pedraz,2013).
Los que están en contra de las
tecnologías prohibidas en el deporte, se identifican con la teoría del derecho
natural, la cual dice que “todo en la naturaleza tiene un propósito, por lo que
los actos contra natura son moralmente incorrectos” (Rachels, 2013, 94-95) y “Un mundo así (con alteraciones genéticas) permitiría
que el ser humano floreciera más allá de los límites impuestos por la
Naturaleza” (Macías, 2013). Desarrollando
lo anterior, las tecnologías que prohíbe el deporte son un acto contra natura
porque se están alterando los genes de una persona, la están modificando. Por
lo que los que están en contra dicen que también sería visto como inmoral por
la teoría del mandato divino, la cual dice “lo moralmente correcto significa lo
ordenado por dios y lo moralmente incorrecto es lo prohibido por Dios”
(Rachels, 2013, 89) y los dioses prohíben que los seres humanos sean alterados
genéticamente. Sin embargo, los que están a favor de estas tecnologías, se
defienden contra argumentando la teoría del derecho natural, diciendo que se ha
demostrado que el universo, el cual es parte de la naturaleza, está inclinado
cada vez más hacia el caos y no hacia el orden, esto también lo menciona
Rachels en su libro Introducción a la filosofía
moral. También argumentan con la teoría del subjetivismo que “es la idea de
que nuestras opiniones morales están basadas en nuestros sentimientos y nada más.
De esta perspectiva no existe nada algo “objetivamente” correcto o incorrecto;
pero no es un hecho que una cosa sea buena y la otra mala” (Rachels, 2013, 64).
Otro argumento que
dan los expertos en filosofía moral en el deporte es la desigualdad. Al momento
que un atleta ingiere sustancias dopantes, que son un tipo de tecnología ilegal
en el deporte, toma una ventaja sobre los atletas que no han ingerido ningún
tipo de “sustancias prohibidas para mejorar el rendimiento; subsidiariamente,
la que se refiere a la transgresión de las condiciones de igualdad que deben
presidir la competición de acuerdo con Montero & Barbod” (citado por Perdaz,
2013). Este argumento tiene que ver con las leyes jurídicas al igual que mentir
por un fin económico. “Ver el espectáculo por el que han pagado sin
“falsificaciones”” (Treviño, 2012) es lo que quiere y demanda la gente; sin
falsificaciones se refiere a que quieren ver competencias en las cuales se diga
toda la verdad, sin esconder nada, por ejemplo si el atleta se dopa o no. A
pesar de estos argumentos jurídicos, la oposición se defiende al dar dos
contraargumentos: “el poder de control antidopaje colisiona directamente con
derechos fundamentales, como es el caso del derecho a la intimidad del
deportista –quien durante la toma de muestras se ve obligado a proporcionar
información sobre su estado de salud y los tratamientos médicos que sigue, lo
que supone una palmaria intromisión en su intimidad” (Macías, 2013). Quizá, en
este tema de lo jurídico, el dopaje puede salir victorioso porque son dos los
derechos que se están violando, es por eso que en gran parte del mundo no está
tan avanzado el tema del dopaje jurídicamente hablando. Yo he vivido en la
época del dopaje, me ha tocado presenciar casos como el de Barry Bonds, Roger
Clemens, Lance Armstrong, entre otros, es por eso que puedo afirmar lo
anterior; solamente me han tocado dos juicios con respecto al dopaje, los de
Barry Bonds [i] y Roger Clemens[ii], por otro lado, he escuchado decenas de casos de dopaje[iii], desde Knut Jensen hasta Marion Jones, empero, la liga y la
sociedad sí sancionan a estos atletas, ya sea con rechazo, suspensiones de
partidos y/o multas económicas como al jugador de los Yankees Alex Rodríguez [iv].
Existen varias teorías o corrientes de
la ética que apoyan o rechazan la ayuda ilegal de tecnologías para mejorar el
rendimiento en el deporte. Los que están a favor de esta postura se inclinan
por ser utilitaristas. Esta corriente, según Rachels, dice que lo bueno o la malo se juzga respecto
a el amonto de felicidad que se genera al realizar una acción, sin importar
como se llegue al final de este camino, usan la famosa frase “el fin justifica
los medios”. Las deportistas que usan este tipo de sustancias o mejoras buscan
el éxito deportivo, eso les causa satisfacción y felicidad, sin embargo, el
camino de cómo lo están haciendo no es el correcto. El Utilitarismo lo acepta
porque el individuo es feliz aun y cuando el método de lograrlo no sea el más
adecuado. No obstante, esta postura tiene varias fallas como que antes de la
felicidad se debe respetar la justicia y los derechos de los demás. En este
caso, los que usan las tecnologías ilegales están siendo injustos porque adquieren
ventaja de forma no permitida al usar estos productos; y están violando los
derechos de los otros deportistas como la igualdad. Rachels dice “el
utilitarismo hace irrelevante el pasado, por eso parece deficiente”(Rachels, 2013,
177).
Por
otra parte, los que estamos en contra de estas tecnologías ilegales en el
deporte nos inclinamos por la corriente Kantiana porque, de acuerdo con
Rachels, argumenta que nunca es correcto mentir, cualesquiera que sean la
circunstancias. Esta corriente respeta las reglas morales universales, ellos
dicen “el fin no justifica los medios” porque el ser humano tiene autonomía y
tiene responsabilidad. Estos deportistas modificados están mintiendo a la
sociedad que los sigue, a sus compañeros
y en general a la mayoría del mundo. Además, están rompiendo otras reglas
morales como el respeto, el compromiso, entre otras. Las personas que estamos
en contra también apoyamos esta postura porque dice que las personas que faltan
a estas reglas se les debe aplicar el castigo merecido, en mi opinión, la
cárcel porque lo que están haciendo es un fraude. Finalmente, apoyamos la postura
de un Contrato Social que, según Rachels, dice que para que exista una
convivencia entre la sociedad, sin dañarse, respetándose, se debe establecer un
gobierno para que garantice al pueblo que todos cumplirán los acuerdos mínimos.
Estos deportistas no están cumpliendo este contrato porque no respetan ni
tienen compromiso por las otras reglas que ponen las comisiones de deportes,
además están causándose daño a ellos mismos y a los demás como los aficionados
porque les están mintiendo en como son en realidad y a los compañeros porque, a
parte de mentirles, les están quitando la oportunidad de competir libre y
justamente.
Conclusión
Cerraré este ensayo con el argumento de
la pendiente resbaladiza. Rachels, analizando un caso en el que un padre
decidió matar a su hija porque sufría de una enfermedad mental, dijo que si no
le daban el castigo que merecía seria “abrirles las puertas a otros para
decidir quien debe morir” (Rachels, 2013, 29). Básicamente, la pendiente resbaladiza
dice que si alguien hace algo todos lo seguirán porque no lo verán mal; esto ya
está sucediendo, ya es una realidad. Al ver a las estadísticas podemos ver que
equipos como Kenia, tiene un porcentaje del 14% de dopados en su equipo, según
la IAAF, y la cifra va aumentando año con año. Es por eso que se tiene que
buscar y encontrar una solución lo antes posible. De esta manera llego a la
conclusión de que el dopaje si no es correcto porte están en practica varias
injusticias y se atenta contra la salud, entonces lo más aceptable seria dejar
practicar a los deportistas dopados en ligas o competiciones con la condición
de que solamente participen personas con esa características, mientras que
también existan ligas y competiciones para personas no dopadas, de este modo no
se engañará a nadie y las competencias serán justas. Con respecto a la noción a
la salud que causa el dopaje, aunque la teoría del mandato divino y quizá la
del derecho natural lo prohíban, cada quien es libre de hacer con su cuerpo lo
que quiera, pero como vuelvo a repetir, no sería moral.
Referencias
Perdaz, M. Debate sobre la salud pública y
despenalización. (octubre de 2013). Recuperado de http://www.scielo.br/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0034-89102013000501011&lang=pt
Macías, E. Prevención,
represión y control del dopaje frente al derecho a la intimidad del deportista
en el marco jurídico español. (agosto de 2013). Recuperado de http://www.scielo.cl/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0718-68512013000100010&lang=pt
Treviño, J. Deportistas tecnológicamente
modificados y los desafíos al deporte. (Enero de 2012). Recuperado de http://scielo.isciii.es/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1886-58872012000100002&lang=pt
Avella, R; Medellín, J. LOS ESTEROIDES
ANABOLIZANTES ANDROGÉNICOS, RIESGOS Y CONSECUENCIAS. (mayo de 2012). Recuperado
de http://www.scielo.org.co/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0123-42262012000300007&lang=pt
Rachels, J (2012).
Introducción a la filosofía mora. Ciudad de México: The McGraw-Hill.
[iv] http://www.record.com.mx/articulo/noticias/RECORD-404376/aceptan-castigo-12-jugadores-de-mlb-por-dopaje-404376
No hay comentarios:
Publicar un comentario