martes, 14 de noviembre de 2017

Discriminación laboral contra las mujeres


Juan Pablo Cárdenas Mariaud
A01632112
Discriminación laboral hacia las mujeres

Desde hace mucho tiempo, los hombres han predominado en el ámbito laboral,  por lo que se le ha discriminado laboralmente a la mujer obteniendo salarios inferiores a los de un hombre que realiza el mismo trabajo. Esta problemática afecta personal y socialmente a toda mujer que desempeña un trabajo. El objetivo de este ensayo es llegar a la igualdad salarial entre hombres y mujeres y que ambos géneros tengan igualdad de oportunidades. Los datos que se presentan en el ensayo son tomados de revistas científicas, se abordarán reflexiones éticas y se concluirá con posibles soluciones y conclusiones generales.

La desigualdad de género en los salarios atenta contra la dignidad de la mujer, ya que se le discrimina por el simple hecho de ser mujer y no se toma en cuenta que tienen básicamente las mismas capacidades que los hombres. Además, no se respetan los derechos de la mujer, dado que todos somos iguales ante la ley y tenemos la misma capacidad de ejercicio; por lo que los salarios deben ser iguales.

Muchas mujeres tienen la necesidad o el gusto de trabajar tanto como para mantener una familia o sentirse superadas, por lo que recibir salarios inferiores es una problemática que afecta el desarrollo social de las familias y a las mujeres que hacen uso de su capacidad de ejercicio.

Viviendo en un país tercermundista se tienen que buscar alternativas de desarrollo para el bien de la comunidad, pero muchas veces no nos damos cuenta  que para superarnos y seguir creciendo hay grandes problemáticas éticas. Es necesario profundizar y descubrir qué aspectos son los que nos afectan como sociedad, ya que a pesar de tener problemáticas éticas, estas se pueden originar por un tema en específico como es la cultura. Explorar los procesos de construcción de sujetos morales, desde una perspectiva diferencial de género, ayuda a elaborar concepciones éticas diferentes concordantes con un proyecto de sociedad democrática, se enfoca en la construcción de una sensibilidad ética a la identidad de género en el desarrollo moral.

Para comenzar con problemáticas éticas, la dignidad de las mujeres es el principal elemento afectado, ya que como seres humanos muchas veces en el ámbito laboral carecen de respeto, autonomía y no se toman en cuenta los valores morales y preceptos jurídicos; este es un tema que tiene su origen desde la cultura y como son educados los mexicanos. También, esto afecta la equidad de género, ya que las mujeres son discriminadas y no viven justa e igualitariamente, por lo que son pocas las que llegan a ser referentes en la toma de decisiones. A pesar de haber un crecimiento en la mano de obra femenina, la relación entre desarrollo humano y el grado de oportunidades para la mujer no es directa. Los logros en materia de igualdad de género sólo se ven parcialmente promovidos por el aumento en los niveles de desarrollo humano. Los avances que las mujeres han alcanzado en longevidad y educación no resultan condición suficiente para garantizar la equidad en las oportunidades en el ámbito económico y político” (Lamelas Castellanos, N; Aguayo Lorenzo, E; 2010, p.11). Lo que nos dice que es necesario trabajar a profundidad en el tema para poder erradicar el problema y crecer como sociedad.

Existe una gran desigualdad de género, las mujeres no tienen las mismas oportunidades que los hombres en distintas áreas laborales y suelen ser discriminadas de distintas maneras en sus áreas de trabajo. “A partir de los resultados del análisis realizado en este estudio se observa que en México el promedio de horas de trabajo doméstico y extradoméstico para las personas que reciben sueldo por salarios, según sexo, muestra en promedio lo siguiente: mujeres, 79 horas promedio trabajadas a la semana, mientras que en los hombres el promedio es de 65.75 horas” (Mendoza Cota, J E; García Bermúdez, K J; 2009, p.83). Este estudio demuestra que efectivamente, las mujeres en promedio trabajan más que los hombres; clara discriminación de género que atenta contra la felicidad de la mujer. Yepes, aborda en su libro que la felicidad significa para el ser humano plenitud, perfección; una mujer que es discriminada tiene más dificultades para llegar a su plenitud y ser feliz.

México es un país altamente machista y eso afecta a todos los mexicanos, dado que las mujeres no aportan lo que pueden que aportar y afecta al desarrollo social de todos los individuos.  Es importante resaltar que otros estudios muestran que la escolaridad de la madre posee un impacto marginal sobre la escolaridad del hijo y el nivel de ingreso que tendrá en el futuro (Bourdieu, 1986 y Fernandes, 2005). Las madres de los hombres están en promedio más escolarizadas que las madres de las mujeres de la misma muestra” (Araújo Freitas, A; 2015, p.300). 

“En relación con la variable ingresos, la retribución mensual promedio fue de 19,892 pesos para los hombres y 14,657 pesos para las mujeres en el ámbito nacional. Respecto a los ingresos por hora, el promedio fue de 126.5 pesos para los hombres y 121.3 pesos para las mujeres” (Mendoza Cota, J E; García Bermúdez, K J; 2009, p.81).

Afortunadamente, no todo son malas noticias,  la cantidad de mujeres en el ámbito laboral ha crecido y se están eliminando estereotipos laborales haciendo que mujeres se dediquen a algo que antes no se permitía o no se veía bien. Es importante entender que la fuerza laboral de las mujeres es benéfica para el desarrollo social.  “Como en todo problema sistémico, han actuado diversos factores para acrecentar la participación de la mujer al mercado laboral, los cuales pueden ir desde el mayor acceso de la mujer en la educación, las demandas de los grupos feministas, el predominio del sector terciario (servicios) de la economía como el gran empleador en el mundo, la demanda de los grandes empleadores de una mayor mano de obra barata, el aumento en el consumo, etcétera. La situación es que actualmente más mujeres se incorporan al mercado laboral, y también, aunque en menor proporción, aumentan las mujeres empresarias o autónomas” (Aguiar Barrera, M E; Gutiérrez Pulido, H; 2017, p.5).

Es importante resaltar que en toda esta problemática las mujeres son apartadas de la justicia social, ya que sus derechos humanos no son respetados, pero existen diversas acciones que pueden ayudar a solucionar el problema y erradicar definitivamente con la discriminación laboral hacia las mujeres. En primer lugar,  “La posibilidad de un orden social más humano y democrático se encuentra así atravesado por la problemática de construcción de valores correspondientes, basados en criterios morales propios y autónomos, y sobre una base dialógica y racional, no pudiendo ser de otra manera en un contexto de múltiples diferencias” (Rodríguez, A; Díaz, Á; 2005, p.249). Aristóteles, decía que la virtud es entendida como un término medio, actualmente está mucho más cargado hacia el lado de los hombres. Es necesario entender el término medio desde un punto ético y no matemático, esto nos ayuda a ser más asertivos y usar la prudencia de mejor manera para facilitar el camino a la felicidad.

En segundo lugar, Maier, dice que con el crecimiento de la presencia de mujeres en escenarios públicos y políticos, se fomenta más una cultura latinoamericana de derechos. También, que de la inequidad de género que hemos vivido, la participación de las mujeres durante los últimos años, abrió la posibilidad de cambiar el significado entre madre y ama de casa para poder cambiar el peso que tradicionalmente se le tiene al género, haciendo así que las mujeres sean más ciudadanas y se democratice la familia y la sociedad (Lamelas Castellanos, N; Aguayo Lorenzo, E; 2010, p.11).

Educar con el ejemplo, conforme más mujeres se hagan escuchar, más mujeres tendrán el valor de luchar por sus derechos. Gran cantidad de mujeres son machistas sin ni siquiera saberlo; esto lo podemos ver en muchas situaciones en el hogar, como que muchas veces la mujer sirve la comida, lava y en general todo el cuidado del hogar, cuando en realidad el hombre también puede contribuir con dichos deberes.

 Otro aspecto que ha ayudado a combatir la discriminación laboral hacia las mujeres, es que gracias a la evolución que ha tenido la sociedad mexicana en la democracia, transición demográfica, la urbanización de la población; el advenimiento de la sociedad de la información y el conocimiento; la apertura comercial; la desestatización de la economía; el incremento en el acceso a la educación y la salud; la aparición de instituciones públicas y de la sociedad civil que tienen como causas la defensa de los derechos humanos; y la igualdad de género.

Para concluir, debemos analizar nuestro entorno profundamente y descubrir que aspectos son los que afectan de origen y desarrollan problemáticas éticas que afectan contra las personas en general, para así combatir desde la raíz la discriminación laboral hacia las mujeres.

Considero que la dignidad y el desarrollo social son las categorías más importantes a considerar sobre la problemática; la dignidad es lo que nos vuelve invaluables, dignos de respeto, respetar la dignidad de la persona es un elemento que ayudaría no solo en la discriminación laboral, sino en todos los aspectos y el desarrollo social nos ayuda a realizarnos y contribuir a la sociedad para vivir cada día mejor, las mujeres al no poder desarrollarse libremente afectan a sus hijos y esto repercute en las posibilidades de que ellos tengan un buen desempeño.

Discriminar laboralmente a la mujer nos afecta a todos, por eso considero que es importante desarrollar más planes democráticos, educar con el ejemplo y aumentar las instituciones públicas que impulsen a las mujeres y ayuden a erradicar con base a los derechos humanos la actual discriminación que sufren.

Erradicar esta problemática depende de ambos géneros, la discriminación laboral no es solo de hombres hacia mujeres, sino que también se da de mujer hacia mujer y todo comienza desde la forma en que nos educan y actuamos.

Gran parte de las mexicanas y mexicanos creen que la violencia contra las mujeres en el transporte público es algo común y aprenden a vivir con ello. Toda la gente que se tomó el tiempo de contestar la encuesta fue víctima o espectador de actos de violencia en el transporte público.

Estas problemáticas afectan directamente a la dignidad de la persona, es inhumano tener que lidiar con este tipo de violencia constantemente, se objetiza a la persona y se ve como un mero medio en lugar de un fin en sí, afectando su desarrollo y libertad.

Concluimos también, que las mujeres sufren una gran desigualdad en cuanto a discriminación sexual se refiere, ya que son mucho más agredidas sexualmente que los hombres, lo que dificulta que puedan vivir plenamente y así alcanzar la felicidad.

La carencia de personal de seguridad, alumbrado y cámaras son aspectos que ayudan a que se sigan efectuando estas prácticas, aquí el gobierno juega un papel importante si se quiere erradicar la violencia contra las mujeres en el transporte público. Al mejorar estos aspectos, habría mayor justicia social, lo que ayudaría a fomentar la igualdad de géneros, el desarrollo sostenible y el bienestar imparcial, dado que los derechos humanos serían respetados y así en mayor medida la dignidad de la persona.



























Referencias

 Aguiar Barrera, M E; Gutiérrez Pulido, H; (2017). Desigualdad de género y cambios sociodemográficos en México. Nóesis. Revista de Ciencias Sociales y Humanidades, 26() 2-19. Recuperado de http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=85945861001

Araújo Freitas, A; (2015). La desigualdad salarial de género medida por regresión cuantílica: el impacto del capital humano, cultural y social. Revista Mexicana de Ciencias Políticas y Sociales, LX() 287-315. Recuperado de http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=42132948011

 Lamelas Castellanos, N; Aguayo Lorenzo, E; (2010). DESIGUALDAD DE GÉNERO EN LATINOAMÉRICA DESDE LA PERSPECTIVA DE LOS INDICADORES DE DESARROLLO HUMANO. Revista Galega de Economía, 19() 1-15. Recuperado de http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=39115730004

Mendoza Cota, J E; García Bermúdez, K J; (2009). Discriminación salarial por género en México. Problemas del Desarrollo. Revista Latinoamericana de Economía, 40() 77-99. Recuperado de http://clacso.mobile.redalyc.org/articulo.oa?id=11820096006

 Rodríguez, A; Díaz, Á; (2005). Género, Cuestiones Éticas y Formación en Valores. Convergencia. Revista de Ciencias Sociales, 12() 247-266. Recuperado de http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=10503708

Rachels, J. (2006). Introducción a la filosofía moral. México: Fondo de Cultura Económica.

Yepes, R. (1997). Fundamentos de Antropología. Pamplona: EUNSA, pp. 211-224.

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